Según el indicador adelantado del PMI, se fija un nivel de 47.7, por debajo de 50 que indica contracción, y se quedaría –en caso de confirmarse- en el nivel más bajo en los últimos 11 meses. Un síntoma más de que las cosas van un poco peor de lo esperado por el Gobierno chino que, incluso, ha aceptado ya que el crecimiento para este año pueda situarse en el entorno del 7%, es decir, medio punto menos de lo previsto inicialmente. En los mercados el dato no ha sentado demasiado bien. A esta hora vemos.

Aquí en España seguimos pendientes de la crónica empresarial y de los resultados que vamos a conocer a primera hora de la mañana. Turno hoy para Iberdrola. La primera blue chip que presenta sus cuentas que, según el consenso de analistas, van a ir en línea con el primer trimestre. Se espera una caída del  beneficio cercana al 12%, motivado por la caída del negocio de generación y de redes. Importantes van a ser las palabras de la eléctrica sobre la reforma del sector y su impacto en los números del segundo semestre, y que para Gas Natural y Red Eléctrica van a tener un impacto de 75 y 90 millones de euros. Malas noticias, dicen desde la patronal UNESA, porque estas caídas repercutirán en el empleo y en las inversiones.

Quedan sólo 24 horas para que conozcamos los datos de la Encuesta de Población Activa sobre la que hay una gran expectación. Los expertos hablan de que podría fijar una estabilización de la destrucción de empleo, y los más optimistas apuntan a una creación neta de puestos de trabajo. ¿Significa esto que ya hemos salido de la crisis? Obviamente no. Desde Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, cree que la solución para que esto empiece a repuntar definitivamente pasa por aumentar el salario de los trabajadores, y terminar con la devaluación salarial