Back to 1986

Lleva por título “La dación en pago es una exigencia del libre mercado”, que es a la vez tan provocador como acertado. Como se dice en el lenguaje de empresa del siglo XXI, es un concepto accurate y digno del mayor de los engagement.

 

El texto de Barta tiene dos aspectos que me resultan sumamente interesantes. Uno de ellos es que las entidades financieras están obligadas a jugar en el mercado, por lo que los expedientes de desahucio son menos eficaces, desde el punto de vista de empresa y de impacto social, que el mantenimiento de un cliente. Esto vale tanto para los bancos de solera como para las cajas reconvertidas a la velocidad de la luz y tratando de que sus ex directivos no pisen la trena.

Esto obligará a seguir situando la esfera del crédito en sus justos dominios, entendiendo el término “justos” como correspondientes y no como moralmente deseables: allí donde el cliente pueda comprometerse a devolver las cantidades prestadas. Y esto conducirá a seguir ajustando los precios a la baja. Ojo que Barta no se va a la última escalada especulativa, sino a la anterior, a la que empezó en 1986. Vayan ustedes restando ceros, aunque les fallen los pulsos.