Con D de debate

Un debate en el que todo apunta que va a tener un ambiente tenso y enrarecido, ya que en él veremos los estragos de cinco años de crisis, 14 meses de ajustes y reformas, niveles de paro nunca vistos en España, una demanda interna bajo mínimos, y un clima de malestar por los últimos casos de corrupción que han aparecido.

Éste va a ser quizá el gran riesgo de estos dos días. El que la oposición –sobre todo el PSOE- quiera capitalizar –y lo consiga- el debate sobre la corrupción. Y digo riesgo no porque no sea importante, si no porque puede distraernos de otros objetivos de tanta o mayor importancia. Sin duda, esperada va a ser la comparecencia de Rajoy, quien además de la defensa de su gestión, va a anunciar las próximas iniciativas legislativas. ¿Y qué contemplan? Pues complicado saberlo, aunque hay quien apunta a que se trata de un amplio plan de calado económico, destinado a introducir algunos estímulos que permitan empezar a dinamizar la economía en torno a finales de este 2013.

¿Ficción o realidad? Pues todavía es complicado saber si ese optimismo del Gobierno es cierto. Sabemos que hay factores positivos, como las exportaciones, la reducción del déficit comercial, la caída de la prima de riesgo y la más que posible reducción del déficit en cerca de dos puntos. Sin embargo, los agentes económicos insisten en que son señales muy tímidas de recuperación. Tan tímidas que Moody’s esta noche ha vuelto a insistir: la banca española es la que más depende del Banco Central Europeo, sólo superada por la banca griega. No sólo eso, si no que llama la atención sobre algo que todos sabemos: la liquidez y la financiación son los dos grandes problemas que tienen ahora mismo los bancos españoles.