Hacer difícil lo fácil

¿El motivo? Que Alemania quiere reabrir el debate sobre el supervisor bancario único europeo. En concreto dice estar preocupada porque no se separan correctamente los cometidos de política monetaria y supervisión financieras en el BCE, algo que puede volver a reabrir viejas heridas que teóricamente ya estaban cerradas.
Estas dudas de última hora de Alemania podrían conllevar un retraso en la puesta en marcha de ese supervisor, lo que al mismo tiempo supondría que la recapitalización directa a los banco no entraría en vigor a primeros del año que viene tal y como estaba previsto.

Una nueva china en el zapato europeo provocada por el Gobierno de Angela Merkel, que ahora mismo mueve los hilos de la moneda única en función de sus intereses electorales. Veremos cuál es la reacción de los inversores, y qué sucede con las primas de riesgo de aquellos países rescatados como España, o de aquellos que puedan venir como Eslovenia, que además tendrá que poner encima de la mesa –si pide ayuda- el 20% del coste total. Un mecanismo que se quiere establecer a partir de ahora, y que ya empezó a hacerse con el rescate a Chipre.

Pero no es la única piedra que Alemania ha puesto en los últimos días. La canciller ha zanjado de pleno cualquier debate posible acerca de poner en marcha una política de estímulos tal y como se viene reclamando desde muchos sectores. Merkel considera que ahora mismo la situación europea sólo puede corregirse con más reformas, más austeridad y no bombeando dinero desde los bancos centrales Punto final, por lo tanto, al debate que ha encabezado el presidente Mariano Rajoy.