Incertidumbre económica

Por un lado hay que fijarse en la evolución de nuestra deuda: situada en el 7.62% a 10 años y la prima de riesgo en los 610 puntos, este martes el Tesoro afronta una nueva subasta de letras a tres y seis meses. También hay que prestar atención a las Comunidades Autónomas y la posible petición de ayuda que hagan al fondo creado para ello por el Gobierno.

 

Valencia fue la primera el pasado viernes. Ahora lo estudian también Cataluña, Murcia y Castilla La Mancha. Las Autonomías no pueden hacer frente a sus compromisos de pago, y mucho menos a emisiones de foma autónoma en los mercados de deuda. La financiación está cerrada para ellas, y a punto de estarlo también para el Estado Central. Se necesita la ayuda de Europa, en donde va a centrar sus esfuerzos el Gobierno durante estos días, aunque parece que no quieren saber nada de nosotros. De hecho, el propio Mario Draghi insinuaba este fin de semana que España debería empezar a plantear a sus acreedores una quita.

En definitiva, que Europa y la ineficacia de nuestros políticos a la hora de ejecutar realmente las medidas que tenemos que llevar a cabo, nos conducen irremediablemente por un camino que ya todos conocemos: el de Grecia a quien, por cierto, el FMI amenaza con cerrar el grifo de las ayudas. Visto el panorama, debería el presidente del Gobierno empezar a plantearse un gran acuerdo de unidad nacional para salir de estas.