Matones de discoteca

Nos lo dicen, también, el mismo día en que la confianza empresarial se desploma, porque las expectativas son peores de lo previsto, y eso que lo previsto ni les cuento cómo era. Y lo peor de todo, nos lo dicen el mismo día, pero no uno antes ni uno después, no, el mismo día en que la zona euro entra oficialmente en recesión. Que a estas alturas recesión oficial u oficiosa tanto da a quienes la padecen, que son siempre los mismos, y a los que no les importa lo oficiales que sean las cifras. Porque son cifras sin valor. Solo cifras.

Pues ese mismo día, y que viva la alegría y la Virgen del Rocío, Standard & Poors nos dice que puede que en 2013 la crisis de deuda se acabe para siempre jamás. Eso sí, añaden, si las cosas se hacen bien. Es decir, si se impone la doctrina política que ustedes y yo sabemos.

Lo que no nos dicen, algo se callan, es que esto no es de ahora. Es desde hace 5 años. O más. Pero primero había que concentrar beneficios y socializar pérdidas, sufrimiento. Y ya después, si eso, cuando no se pueda apretar más, se relaja la pestaña. Es decir, matones de puerta de discoteca, que han aprendido lo suficiente como para ganarse la vida sentenciando profecías autocumplidas.