Sobre el primero se espera que hoy empiecen a aclararse los distintos puntos sobre la reforma de su ayuda financiera… Se trata de concretar el plan para conseguir que en 2016 alcance superavit primario, y lograr que en 2020 su deuda esté situada en el 124% ,frente al 120% establecido anteriormente. El país heleno será el que más tiempo lleve, pero también España tendrá su protagonismo, ya que el ministro de Guindos va a firmar con el presidente del MEDE la ayuda para España.

Se van a desbloquear 37.000 millones de euros que llegarán a España durante esta primera quincena de diciembre, y se inyectarán técnicamente en febrero de 2013. Una ayuda que llega después de comprobar que nuestro sistema financiero ha dado ya sus primeros pasos: fundamentalmente la puesta en marcha de los distintos planes de viabilidad, y la del banco malo, que en los próximos días va a recibir los activos tóxicos de Bankia, NovacaixaGalicia, Catalunyabank y Banco de Valencia. Se avanza poco a poco, por tanto, en esta reforma financiera que debe devolver el crédito bancario, aunque esperemos que no se cumplan los peores augurios del semanario británico The Economist. En su último número asegura que en este “rescate de las tapas”, estamos todavía ante el plato principal, y que nos queda por tener el postre amargo… Fundamentalmente, señala, por el empeoramiento del escenario macroeconómico, y el aumento constante de la tasa de desempleo, que puede llevar a ver un problema en el pago de las hipotecas.

La vivienda es, precisamente, una de las prioridades de los españoles. Familias que cada vez lo tienen más complicado para llegar a fin de mes. Especialmente las más de 400.000 que viven de la pensión de los abuelos. Van a ver cómo el año que viene, se lo venimos contando, no se va a actualizar en función del IPC, si no que subirá un 2% para aquellas inferiores a los 1.000 euros.