Sindicato maripuri del crimen

A partir de aquí, tomen ustedes el refrán que prefieran para justificar lo injustificable. Desde el latino errore humanum est hasta el beatífico pagar justos por pecadores. Pero, tópicos aparte, si lo mejor que tiene la cúpula empresarial para elegir a su mandamás son personajes tan siniestros, es mejor que se constituyan como sindicato del crimen. Organizado, de guante blanco, y todo lo aparente y finolis maripuri que me quieran, pero del crimen.

 

Que si fuera solo un empresario travieso que se les ha colado de rondón, pues mira, pues oye, pues dos avemarías y que no se repita. Pero es que es algo más. Es mucho más. Es el peloteo constante de colegas, políticos, periodistas, asesores, cargos de troche y moche, carguitos oficiales y jefecillos públicos. Peloteo para quien está en el cargo. Peloteo falto de crítica y aspirante a estómago agradecido. Por eso espero que, si nuestros amigos tienen que caer, caigan con todo el equipo. Para escarmentar a quienes viven del cuento.