Los verdaderos paracaidistas

Y la verdad, no sé ustedes pero a mí no deja de rondarme por la cabeza la idea de que un salto de ese calibre guarda ciertas similitudes con esta estafa global llamada crisis. Por ejemplo, para caer tan en picado primero hace falta subir mucho en un globo aerostático. La metáfora entre globo en las alturas y burbuja especulativa es, como mínimo, una deliciosa tentación.

Pero el paralelismo correcto es que en realidad no importa lo intensa y vertiginosa que sea la caída, sino el hecho de que esté planificada y se conozca qué riesgos se corre en cada momento. Un ejercicio de responsabilidad que brilla por su ausencia en los Gobiernos de este primer mundo, expertos en camuflar el pinchazo, su pinchazo, antes, durante, ahora, y durante muchos años. Si les seguimos haciendo caso es porque no nos damos cuenta de que son unos “paracaidistas”, en el sentido peyorativo del término: gente que busca defender otros intereses antes que los del bien común.