Pedro Sánchez advierte a los empresarios de que «la fiscalidad verde en España es ínfima»

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, advirtió a los empresarios de que “la fiscalidad verde en España es ínfima y no está desarrollada” y les aseguró que su Ejecutivo tiene el objetivo de cerrar la legislatura con “equilibrio presupuestario”.

Así se expresó Sánchez en la clausura de la XXXV Reunión del Cercle d’Economía en Sitges (Barcelona), donde fue interpelado por sus intenciones en política fiscal.

Tras citar a Olof Palme para defender que su intención es “acabar con la pobreza, pero no con la riqueza”, el presidente recordó que la política fiscal “es un instrumento, pero no un fin”.

En esta línea, añadió que en la legislatura que ahora se inicia la fiscalidad debe permitir “modernizar la economía apostando por la ciencia y la innovación, impulsar la transición ecológica y luchar contra la desigualdad”.

“La fiscalidad tiene que estar al servicio de estos grandes objetivos”, reiteró Sánchez, quien quiso “garantizar” que también “estará alineada con el objetivo vital del país, el crecimiento económico”.

Por otro lado, destacó las aportaciones del Ejecutivo en otras dos fuentes de ingresos para el Estado: la lucha contra el fraude fiscal, con la que ha obtenido unos “niveles récord” de 15.000 millones de euros el año pasado, y la reducción del coste de los intereses de la deuda.

Por todo ello, dijo a los empresarios estar “convencido” de que “vamos alinear los objetivos de unos y de otros” porque, según reconoció, “necesitamos a los empresarios para mejorar el crecimiento, la productividad y la competitividad”.