Philip Morris, en busca el tabaco sin combustión

Desde la multinacional que comercializa Marlboro buscan nuevos productos alternativos al cigarro menos dañinos para la salud

El mercado del tabaco tiene que evolucionar en el futuro, este es un hecho que Philip Morris ha introducido como un mantra propio en los últimos siete años, ya que desde 2008 tiene a 400 expertos trabajando en El Cubo, la base central del proyecto en Suiza, nuevos productos que sean menos dañinos que un cigarrillo.

A lo largo del tiempo, se han desembolsado más de 2.000 millones de dólares en esta investigación de la que se ha desvelado una chocante verdad: «los riesgos para la salud se encuentran en la combustión».

Es por esta razón, por la que el primero de los productos de riesgo reducido (RRPs) que se lanzará al mercado por la tabacalera es un dispositivo electrónico que caliente el tabaco, por debajo del punto de combustión, y que libera la nicotina y el sabor, evitando quemar los componentes peligrosos.

Junto al IQOS, nombre del producto que se comercializará en algunas capitales europeas como Lisboa o Moscú, la compañía está desarrollando otros tres productos nuevos y en la actualidad comercializa varias marcas de cigarrillos electrónicos.

Un mercado en caída

En la actualidad, no existe regulación para este tipo de productos dañinos para la salud. Sin embargo, se espera que para el mes de mayo se apruebe una nueva directriz que fijará las normas en fabricación, presentación y venta de los productos del tabaco y relacionados.

El viraje en la dirección del barco de esta sociedad se debe a las caídas generalizadas que esta sufriendo la industria del tabaco. Por ejemplo, durante 2015 ganó un 8,3 por ciento menos que en el ejercicio anterior, quedandose en los 6.873 millones de dólares.

Diario Financiero