Repsol afirma que «desconoce» los detalles del robo en Colombia

Los estudios de los dos discos duros sustraídos habrían costado 17 millones de dólares a la petrolera

«No sabemos nada más allá de lo que dice el teletipo», así lo afirman fuentes de Repsol consultadas por Diario Financiero ante la noticia de la sustracción de dos discos duros con información confidencial de la petrolera de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) de Colombia.

Los dos discos duros sustraídos contendrían estudios sobre posibilidades de exploración de pozos petroleros en un bloque del caribe colombiano y por los que la petrolera habría pagado un montante de 17 millones de dólares (más de 15,55 millones de euros).

La denuncia del robo ha sido realizada hoy mismo por el ministro colombiano de Minas y Energía, Tomás González, quien en la emisora nacional Caracol Radio calificó  de «muy valiosa» la información que recogida en esos estudios. Sin embargo desde Repsol no demuestran, al menos verbalmente, signos de alarma «lo único que pueden obtener es el potencial de trabajo que tenemos en la zona», explican. De hecho, desconocen si se ha convocado o se va a convocar alguna reunión al efecto entre los miembros del consejo directivo o incluso con la ANH colombiana «no podemos decir nada porque no sabemos nada». Algo que resulta cuanto menos sospechoso teniendo en cuenta que fue el pasado viernes cuando, según González, se produjo la sustracción y se trasladó el aviso a la Fiscalía, quien aún no se ha pronunciado sobre el caso.

Por su parte, el presidente de la ANH, Mauricio de la Mora, en declaraciones a la emisora colombiana, explicó que el robo se descubrió durante el traslado «rutinario» de los discos duros a un sistema central y reconoció que «los protocolos de seguridad que se tenían no eran los adecuados». No obstante, de la Mora afirmo que la petrolera española será informada del hecho a lo largo del día de hoy e insistió en que «espera» que no presente una demanda contra la Agencia.

No es la primera vez

No es la primera vez este año que Repsol tiene que enfrentarse al robo. El pasado mes de abril la petrolera denunció la desaparición de dos intercambiadores de calor que iban a ser instalados en las plantas de destilación de la refinería de Escombreras, en Cartagena (Murcia). Piezas que por su tamaño (quince metros de longitud y cinco de diámetro) no pasan desapercibidas y que sólo pueden ser empleados para este tipo de industrias o para su venta como chatarra.