Trabajadores de Adif y Renfe se manifiestan en Madrid para pedir «contrataciones urgentes»

Trabajadores de Adif y Renfe se han manifestado este sábado entre las sedes madrileñas de estas dos empresas públicas para pedir 500 contrataciones urgentes en Renfe y otras 300, como mínimo, en Adif.

Así lo ha explicado a Europa Press el secretario general de UGT ferroviarios, Ángel Ruiz, que ha denunciado que estas dos empresas «se han quedado descapitalizadas de trabajadores» y sin empleados que puedan atender el trabajo diariamente. «Pedimos solamente empleo, nuevas contrataciones», ha manifestado Ruiz, que se ha quejado de pertenecer a una plantilla «envejecida».

Además de representantes de UGT, a la marcha han acudido también el Sindicato Ferroviario Intersindical, la Confederación General del Trabajo y Comisiones Obreras (CCOO). Según este último sindicato, los ferroviarios asistentes a la manifestación han sido unos 2.000.

El secretario general del sector ferroviario de CCOO, Manuel Nicolás Taguas, ha declarado que continuarán las movilizaciones «si el Ministerio sigue en su afán de degradar más el ferrocarril público, privatizando actividades rentables para el erario público y recortando las plantillas de forma alarmante». Además de reinvindicar más empleo, Taguas ha pedido «un ferrocarril públicode calidad» y la «recuperación de la capacidad contractual de los sindicatos, que la tienen secuestrada».

De acuerdo con este sindicato, los presupuestos de Adif aprobados por el Consejo de Administración con el voto en contra de CCOO, prevé 2100 trabajadores menos hasta 2019, «y Renfe va por el mismo camino».

Finalmente, el secretario general del Sindicato Ferroviario Intersindical, Rafael Escudero, ha criticado que «toda la legislatura del Partido Popular ha estado marcada por decisiones para desmantelar los servicios públicos» y ha definido como «despropósito» que se haya comprado «una cantidad ingente de trenes nuevos para ponerlos ahora a disposición de empresas privadas».

Además, ha apuntado que «la experiencia del Reino Unido y Argentina demuestran que cuando se entrega la infraestructura a empresas privadas ponen por encima de la calidad del servicio la rentabilidad y empieza a haber más accidentes».

Europa Press