Hoy nos quedamos con Repsol. La agencia estadounidense Standard&Poor’s ha confirmado el rating de BBB- para la petrolera, aunque ha rebajado su previsión, de estable a negativa. La española no es la única, ya que la casa de ratings ha modificado las calificaciones de 14 compañías de exploración y producción de petróleo y gas.

Unas revisiones que se producen después de que S&P haya actualizado también sus perspectivas sobre el precio de petróleo. De hecho es este aspecto el que ha llevado a la firma a situar la perspectiva de Repsol en negativa, a pesar de las desinversiones que ha llevado a cabo y con las que ha conseguido ingresar 1.000 millones de euros en los últimos días.

Desde S&P se destaca que los precios del crudo tendrán efectos adversos en la generación de caja, que solo se compensarán con más desinversiones.

Enrique Zamácola, director de mercados de Link Securities, ha explicado en Gestiona Radio que la petrolera todavía cuenta con activos líquidos para deshacerse de ellos, precisamente para evitar un deterioro de su rating. “Lo que más nos preocupa es la posibilidad de que vean reducidos sus dividendos”.