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3, 4 o 5 estrellas, un jamón Enrique Tomás para cada momento

Compartir y disfrutar en la mesa de un buen jamón forma parte de la cultura española. Pero para escoger o incluso conocer bien el producto se debe tener en cuenta que existe una gran variedad de alternativas dependiendo de diversos criterios que incluyen la alimentación, variedad racial, tiempo de curación, tiempo en libertad, engorde, procedencia… toda una cultura gastronómica que no es fácil de entender y que, además, no es absolutamente necesaria aprender para disfrutar de un producto gastronómico exclusivo en el mundo.

Por eso, uno de los mayores comercializadores del jamón que existen en España, Enrique Tomás, pone a disposición los diferentes tipos de jamón catalogándolos de manera sencilla, con base en una escala de estrellas, para que cualquier consumidor pueda entender las diferentes características y calidades y, por lo tanto, elegir correctamente cada jamón según la ocasión.

Y es que tomarse un bocadillo, o sentarse en la mesa con amigos después del trabajo no es lo mismo que compartir un momento más elegante como en una cena para dos o incluso en una boda. Es cierto que sea cual sea la ocasión, el jamón debe dar placer, pero la forma de consumirlo o el nivel de exigencia del momento, hará que una persona elija una u otra opción.

Así se puede conocer cada jamón de forma sencilla y útil

Como se adelantaba anteriormente, el jamón es un producto gastronómico único en el mundo y muy especial, ya que su sabor final comienza a definirse desde la misma cría. El tipo de alimentación y, por supuesto, la raza son los dos rasgos determinantes para Enrique Tomás a la hora de clasificarlos por estrellas con sus respectivos colores. Sin duda alguna, todo el proceso de “cocinado” del jamón (esto es de salado, secado y curación) de cada maestro jamonero marcarán también la diferencia en la calidad final del apreciado manjar.

De esta manera, se encuentra en primer lugar el jamón tres estrellas, color naranja que se trata de un jamón gran reserva. Es el primer escalón en la escala del placer al degustar jamón. Un producto suave, procedente de un cerdo de raza blanca, o sea no ibérico, que ha sido curado durante al menos 18 meses. Es perfecto para una degustación más cotidiana, sin tener que hacer un esfuerzo económico y que combina perfectamente con cualquier tipo de consumo.

El siguiente nivel que se encuentra en la escala de categorías de Enrique Tomás es el jamón cuatro estrellas. Aquí ya se ha cambiado de raza, es jamón ibérico, procedente del cerdo ibérico, el único capaz de infiltrar la grasa en el músculo, de ahí su sabor diferente a cualquier otro en el mundo. Nutrido con una alimentación controlada en granja y enriquecida para obtener un sabor delicioso, pero también suave. Su mayor curación (al menos 24 meses) le otorga ya unos matices aromáticos muy apreciables, que se pueden degustar en las diferentes presentaciones, como taquitos, virutas o lonchas, además de la pieza entera. Un producto de gran categoría que sigue siendo asequible para diferentes ocasiones.

Un paso más arriba se encuentra el jamón cuatro estrellas premium, color verde. La diferencia con el anterior radica en la alimentación (cebo de campo). El cerdo ibérico de donde procede ha combinado una nutrición natural porque ha pastado en el campo con la de la granja, de ahí su nombre. Ha hecho también mucho ejercicio, lo que ha resultado en una mayor infiltración de grasa que, a su vez, incide en un sabor con aromas más complejos y más sofisticados, por eso en Enrique Tomás le han dado un nivel superior al cuatro estrellas, llamándole premium. La relación calidad-precio de este producto es difícil de igualar.

Categoría superior, los jamones 5 estrellas

Los jamones de 3, 4 estrellas y 4 estrellas premium son productos muy cuidados y suponen esos primeros pasos en la escala de placer, con ciertas diferencias. Pero se trata de opciones de consumo que se pueden dar de manera generalizada y más habitual. En el caso de querer degustar un jamón de una categoría aún mayor y con una complejidad aromática selecta y superior, se debe acudir a las opciones de jamón 5 estrellas, color rojo y jamón 5 estrellas premium, color negro, jamones ibéricos de bellota de al menos 36 meses de curación.

En el caso de su jamón 5 estrellas, se está hablando de un jamón de raza 50 % ibérica de bellota. Equilibrado, sabroso, con intensidad y suavidad, y un color rojo vivo que una persona disfrutará no solo con el paladar, sino también con la vista.

En el nivel más alto del placer y para paladares que buscan una intensidad aún mayor, y una experiencia de sabor más profunda, tienen el jamón 5 estrellas premium, “la joya de la corona”, jamón 100% ibérico de bellota, que es probablemente el mejor producto gastronómico que existe. Pueden pasar más de 4 años desde que comienza la producción de este tipo de jamón hasta que llega al plato, y supone no solo un producto gourmet único, sino el reflejo de toda una tradición cultural gastronómica y centenaria que gira en torno al mismo y el cuidado para lograr un sabor excepcional.

Enrique Tomás selecciona estos jamones uno a uno, y de manera manual, con un equipo de expertos que convierte la marca en un sello de calidad. Si un jamón llega a ser Enrique Tomás es porque es de los mejores de su categoría, ya sea 3, 4 o 5 estrellas, ya que todos los jamones Enrique Tomás son necesariamente excelentes.

Asimismo, en el catálogo de Enrique Tomás están disponibles diferentes versiones en tamaño y gramaje que se pueden adquirir para cada ocasión.

Una buena mesa española siempre está acompañada de un buen jamón. Es por ello que Enrique Tomás es una garantía de calidad sea cual sea la selección para cada ocasión.

Para conocer todas las opciones disponibles, Enrique Tomás cuenta con una web en la que se pueden adquirir todos sus productos.

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