Abertis alcanzó unos ingresos de 2.260 millones de euros en los seis primeros seis meses del año, lo que supone un incremento del 26% respecto al mismo periodo del año pasado como consecuencia de la mejora del tráfico en todas sus autopistas, tanto en España como en el extranjero.
La compañía participada por ACS y la italiana Atlantia registró un crecimiento del 22,4% en el tráfico de sus carreteras, siendo España uno de los mercados que mejor se han comportado en esta primera mitad de año, según los resultados adelantados por Abertis.
En concreto, el tráfico nacional se incrementó un 27,4% respecto a los primeros seis meses de 2020, cuando las restricciones adoptadas para contener pandemia afectaron gravemente a la movilidad. Pese a este crecimiento, las autopistas de Abertis en España todavía registran un tráfico un 20,6% inferior al anterior a la crisis sanitaria.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) también se disparó un 40%, hasta los 1.554 millones de euros, debido a la mejora del negocio operativo, que aportó 352 millones adicionales, así como a la consolidación de las compras que acometió el año pasado en México y Estados Unidos.
Se trata de la Red de Carreteras de Occidente, uno de las mayores empresas de autopistas de México, de la que Abertis adquirió una participación de control por 1.500 millones de euros. En el primer semestre, su tráfico creció casi un 20%.
Por su parte, en el mercado estadounidense se hizo con otra participación mayoritaria de Elizabeth River Crossings (ERC), unos túneles situados en Virginia, por 1.000 millones de euros. Sus autopistas en Estados Unidos registraron un crecimiento del 18,7% en la primera mitad del año.
Una vez que ACS vio truncada su operación para hacerse con las autopistas italianas, la constructora que preside Florentino Pérez ya ha adelantado en varias ocasiones su interés en seguir realizando compras de este tipo a través de Abertis para seguir creciendo en el mercado concesional, por lo que se prevén más adquisiciones en el futuro.
La caja de Abertis a cierre de junio ascendía a 4.400 millones de euros, a lo que se suman otras líneas de crédito por valor de 4.300 millones, que elevan su liquidez a 8.700 millones de euros, y con una deuda financiera neta de 20.000 millones de euros.