ACS registró un beneficio neto de 551 millones de euros entre enero y septiembre, lo que supone un aumento del 0,5% en comparación con los mismos meses de 2013 (548 millones).

Según informó este jueves la compañía de construcción y servicios a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), las ventas en el periodo ascendieron a 28.232 millones, un 2,6% menos. Desde el grupo señalaron que este descenso es consecuencia de la variación de los tipos de cambio, especialmente la depreciación media del dólar australiano.

También se ve afectada esta cifra en sentido negativo por la venta de activos en 2013 y en sentido positivo por las adquisiciones de Dragados y la consolidación global de Clece a partir del tercer trimestre de 2014. ACS señala que sin ninguno de estos impactos, las ventas hubiesen crecido un 2,3%. Por ramas de actividad, los ingresos en construcción fueron de 21.480 millones (-3,5%), en servicios industriales se situaron en 5.171 (-4,1%) y el medio ambiente alcanzaron 1.600 millones (+19%).

La actividad fuera de España representa el 84,3% de las ventas. En negocio nacional, que representa el 15,7% de las ventas, generó unos ingresos de 4.424 millones de euros, un 5,5% más. ACS destacó que las ventas según áreas geográficas demuestran la «diversificación de fuentes de ingresos del grupo», donde Asia Pacífico representa el 40,8% de las ventas, América un 33,9% y Europa un 24,6%. Por otra parte, la cartera de ACS se situó en 66.135 millones en septiembre, lo que supone un descenso de un 2,4% en los últimos doce meses.

Mientras, la deuda neta cerró el periodo en 5.872 millones, tras aumentar en 1.638 millones desde la reportada en diciembre de 2013, fruto de las inversiones realizadas, principalmente la adquisición de Leighton y Hochtief, y a la variación estacional del fondo de maniobra.

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