ACS pretende crear un gran grupo de infraestructuras europeo con gran parte de los 5.000 millones de euros que ingresará por la venta de su división industrial, Cobra, de la mano de su socio italiano Atlantia y centrándose principalmente en la concesión de autopistas.
Así lo ha avanzado el presidente de la constructora, Florentino Pérez, durante una conferencia con analistas en la que ha desvelado los planes de la compañía para aliarse con socios estratégicos en la promoción de infraestructuras, como las autopistas italianas, actualmente en venta.
No obstante, el directivo ha aclarado que cualquier movimiento en ese sentido tendrá que contar siempre «con los deseos del Gobierno italiano», ya que es el primer interesado en adquirir las autopistas tras un acuerdo que obligó a Atlantia a ponerlas en venta tras el derrumbe de un puente en Génova en el verano de 2018.
El Ejecutivo italiano ya ha remitido su oferta definitiva, junto con los fondos Blackstone y Macquarie, que ahora está analizando Atlantia. En caso de no tener éxito, la compañía española podría comenzar las negociaciones para plantear distintas posibilidades que culminen con la operación.
Aun así, si ACS no consigue dar respuesta a su interés por hacerse con estos activos, Florentino Pérez ha admitido que ya ha recibido otras ofertas encaminadas a la creación de este gran grupo de infraestructuras. «Si es con nuestros amigos italianos, encantados, si no, lo haremos con otros interesados», ha añadido.
PROYECTOS EN RENOVABLES
A este objetivo destinará gran parte de los 5.000 millones que recibirá al contado por parte de Vinci, una vez la transacción se cierre en el último trimestre de 2021, tras la obtención de las autorizaciones pertinentes de Competencia, así como la posibilidad de que tenga que pasar el visto bueno del Gobierno por el blindaje decretado en el marco de la pandemia para evitar que empresas extranjeras tomen grandes participaciones en españolas.
El resto del importe por la venta de Cobra lo destinará a alcanzar otro objetivo similar: crear una de las empresas líderes de energía en Europa, en este caso de la mano de su nuevo socio francés, Vinci.
El primer paso lo darán cuando ambas compañías creen una nueva sociedad participada al 51% por la gala y al 49% por ACS, una operación a la que ya se han comprometido. Los proyectos identificados que formarán parte de esta ‘joint venture’ alcanzarán los 25 gigavatios (GW) de renovables, principalmente en eólica y fotovoltaica.
«La operación es muy buena para todos, para Vinci y para nosotros. Ahora tenemos 5.000 millones para invertir, tenemos las ideas claras de lo que queremos. Habrá otro pago de 600 millones y crearemos una ‘joint venture’ que tiene un gran valor y permitirá mantener una empresa de renovables líder de Europa», ha explicado Pérez.
RENUNCIA DEL CONSEJERO DELEGADO
El presidente ha contextualizado esta operación en el proceso de transformación y simplificación del grupo, que permitirá reducir la «complejidad» de la compañía, un proceso en el que también ha enmarcado la renuncia del consejero delegado, Marcelino Fernández Verdes, a seguir en el cargo.
Según Florentino Pérez, una vez completado este proceso, el consejo analizará las distintas alternativas de gobierno corporativo. No obstante, ha defendido que Fernández Verdes, que seguirá siendo consejero delegado de Hochtief y presidente de Abertis –concesionaria participada junto a Atlantia–, ayudará al proceso de inversión de autopistas.
Respecto al dividendo, ha detallado que el próximo, a entregar en julio, será de 1,23 euros, que se suma al complementario de 0,16 euros entregado en julio del año pasado y al de 0,45 euros repartido el pasado mes de febrero. En total, 1,84 euros por acción, en torno a 575 millones de euros.