El exvicepresidente estadounidense Al Gore, que en el año 2000 se quedó a las puertas de la Casa Blanca tras unas disputadas elecciones con George W. Bush, ha afirmado que los comicios de este año son «completamente diferentes», pero ha subrayado que las premisas siguen siendo las mismas que entonces: «Contar todas las papeletas depositadas de forma legal y acatar la voluntad del pueblo estadounidense».
Gore perdió la Presidencia tras un ajustado resultado en Florida que no fue resuelto de forma definitiva hasta que no se pronuncio el Tribunal Supremo el 12 de diciembre a favor de Bush. Tanto entonces como ahora, el vencedor no se supo la noche electoral como es costumbre en Estados Unidos.
En este caso, sin embargo, a la incertidumbre se ha sumado la agitación promovida por el presidente, Donald Trump, que ha denunciado sin pruebas un supuesto «fraude» y ha acusado a sus rivales demócratas de intentar «robar» las elecciones manipulando los resultados del voto por correo.
«Estas elecciones son completamente diferentes de las de hace 20 años. Joe Biden tiene múltiples vías para lograr la victoria. Yo le apoyo y espero que lo logre muy pronto», ha dicho Gore en declaraciones a la cadena NBC News, las primeras desde la jornada electoral.
Gore ha emplazado a Trump a «hacer lo correcto» si finalmente se confirma su derrota. «Sí, sorprendería a mucha gente, pero sería lo mejor para el país», ha apostillado.
El exvicepresidente ha alabado la alta participación de estas elecciones, la mayor de la historia de Estados Unidos, y ha descrito como «héroes» a los votantes que han ejercido su derecho, en algunos casos haciendo horas de cola «en mitad de una pandemia».