El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, quiere eliminar la obligatoriedad en la presentación de los resultados y estados financieros trimestrales para homologar las condiciones a las reglas vigentes en otros países en vistas a mejorar el atractivo de las plazas financieras españolas.
Albella se declaró firme defensor de dar el máximo posible de información en pro de la transparencia pero subrayó que España es, junto a Rumanía y Polonia, el único país donde se exige a las cotizadas divulgar más informes de los anuales y semestrales.
Durante un encuentro organizado por la Asociación de Mercados Financieros, apostó por cambiar la norma para que su entrega sea voluntaria y no obligatoria subrayando en los países donde no resulta imperativo el desglose trimestral el 80% de las compañías lo hacen en favor de la transparencia y mejor conocimiento de los mercados.
Solo quedaría, por tanto, un 20% que prefiere sujetarse a la norma menos estricta y comunicar sus números exclusivamente dos veces al año. «Es raro que seamos prácticamente el único país que lo hace (…) Esa peculiaridad puede hacer al mercado menos atractivo para el que considera que eso es importante», explicó.
A juicio del presidente de la CNMV, es preciso «eliminar» las reglas normativas que nos separan del resto y ampliar el menú con opciones existentes en otros países.
«Cuanto más ‘ñ’ eliminemos, mejor», indicó para abogar a renglón seguido por instaurar fórmulas como las acciones sin voto o con bajo voto para ofrecer una mejor visión de «mercado abierto y acogedor», y atajar medidas desincentivadoras ya que la existencia de determinadas fórmulas legales «hace a la empresas decidirse por un país u otro».
A título de ejemplo refirió que el fabricante Fiat trasladó su sede social a Holanda porque en Italia no era posible aumentar el derecho de voto transcurrido un tiempo de permanencia en el capital.
Y bajo esta misma estrategia de posicionar bien a España declaró el interés de la CNMV en prestar atención a las nuevas tendencias como «las finanzas sostenibles», para lo que reforzará la imagen de modernidad de los mercados», y estar atenta a los nuevos fenómenos y opciones que traen las tecnologías.
REGLAS DE MERCADO PARA LOS ICOS
Albella es de la opinión de que los retos que plantean las criptomonedas, los ICOS o el blockchain hay que abordarlos con un enfoque «abierto» pero siendo «cauto en los principios».
Así, en el caso específico de los ICOS o mecanismos que permiten a las compañías captar recursos para financiar los proyectos empresariales al estilo de una OPV apuesta porque se rijan por la ley de mercado de valores, en la medida que se trata de una captación de recursos como cualquier otra operación tradicional, donde hay que velar por los derechos de los inversores.
Durante su intervención, Albella puso en valor que la CNMV «es una institución consolidada y muy valiosa», «genuinamente independiente» de los poderes públicos y con una operativa autónoma de los Gobiernos cuando se cumplen ahora 30 años desde su creación.
Sin embargo, demandó más autonomía o independencia presupuestaria. «Hemos perdido algo de fuelle en los últimos años», se quejó en relación a la capacitación de recursos, cuando sus tareas y competencias han sido crecientes.
Albella reclamó mejor dotación de medios para que el organismo sea también capaz de retener talento «si queremos tener un supervisor potente y eficaz, que es lo que la sociedad demanda» y para cubrir su función de supervisor nacional y ganar peso en las esferas internacionales, aprovechando su participación con las autoridades europeas de mercados de valores ESMA e Iosco, y el Consejo de Estabilidad Financiera y el Instituto Iberoamericano del Mercado de Valores.
La CNMV ha diseñado, de hecho, un plan estratégico para los dos próximos años donde dijo que potenciará una supervisión «valiente y decidida», con mayor proyección y presencia pública porque «es importante que se sienta que el supervisor está ahí haciendo su trabajo», y que impulse cambios regulatorios como los apuntados para mejorar el atractivo de los mercados.