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Aprender los fundamentos del gancho tunecino y explorar sus infinitas posibilidades

El gancho tunecino es una técnica de tejido muy antigua, pero con un sinfín de posibilidades para que los apasionados la exploren. El mundo del ganchillo es vasto y diverso, lleno de técnicas, puntos y herramientas para que los artesanos creen innumerables piezas únicas y hermosas.

En este artículo, el equipo de Lidia Crochet Tricot, un comercio electrónico especializado en hilos textiles para manualidades, exhibe tanto los fundamentos básicos del ganchillo tunecino como sus infinitas oportunidades de aplicación.

Qué es el gancho tunecino

El ganchillo tunecino, también conocido como crochet afgano, es una técnica que se diferencia del crochet tradicional en su planteamiento y resultado final. Mientras que el crochet convencional utiliza una aguja común con un solo gancho en el extremo, el ganchillo tunecino se caracteriza por su eje largo con un gancho en una punta y un mango en el otro, similar a una aguja de tejer.

Por lo tanto, esta estructura única permite al «crocheter» trabajar con una gran cantidad de puntos en su aguja y crear un tejido más denso y uniforme.

Cuáles son los fundamentos del gancho tunecino

Para dominar el ganchillo tunecino es fundamental comprender sus fundamentos básicos y, en primer lugar, resulta necesario seleccionar los materiales correctos. Las agujas de ganchillo tunecino están disponibles en varios tamaños y materiales, desde plástico hasta aluminio y madera, y la elección del material puede afectar la textura y la tensión del trabajo final. Además, es importante escoger un hilo adecuado al tamaño de la aguja y al proyecto previsto para que la pieza tenga la apariencia deseada.

Según explican desde Lidia Crochet Tricot, el punto simple tunecino es sencillo de realizar y constituye una base sólida para proyectos más complejos. Para hacerlo, el artesano inserta el ganchillo en el primer bucle de la aguja, pasa un bucle de hilo a través de la labor y lo deja en la aguja. El proceso se repite para cada bucle de la aguja hasta haber tejido todos y luego se da la vuelta a la pieza y se retiran los puntos de la aguja.

Además del punto simple tunecino, existe una variedad de otros puntos para explorar como el punto doble tunecino, el punto de crochet tunecino y el punto entrelazado tunecino. Cada uno tiene sus propias características únicas y se utilizan de diversas formas para crear texturas interesantes y patrones complejos.

En resumen, en Lidia Crochet Tricot destacan que el ganchillo tunecino ofrece a los amantes del crochet una forma única y emocionante de explorar su creatividad y producir piezas impresionantes y únicas. Desde la marca entienden que quienes son capaces de dominar los conceptos básicos del ganchillo tunecino y experimentar con diferentes puntadas y técnicas, tienen la posibilidad de realizar una variedad infinita de proyectos, desde bufandas, chales y mantas hasta prendas de abrigo, cojines, alfombras y otros elementos de decoración del hogar.

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