El nuevo sistema de acceso a la administración electrónica Cl@ve ha comenzado a funcionar para servicios de la Seguridad Social, de la Agencia Tributaria, de Tráfico y del Ministerio del Interior y se irá extendiendo al conjunto de servicios del Estado hasta estar implantado por completo para finales de 2015.
Esta nueva herramienta permite a los ciudadanos tener una misma clave para todos los servicios, que se obtiene a través de la web http://clave.gob.es.
Están previstas dos modalidades de claves, una para quien usa estos servicios de forma esporádica, que consiste en una contraseña y una clave que se recibe en el móvil para ese uso puntual, y otra clave permanente, que exige un identificador y una contraseña que deberá custodiar el ciudadano. Adicionalmente, en algunos servicios, se requerirá también un código que se enviará al móvil.
Ya es posible utilizar Cl@ve en diferentes servicios. En la Seguridad Social se pueden hacer consultas y trámites frecuentes incluidos en el servicio ‘Tu Seguridad Social’; en la Agencia Tribuntaria se accede a todos los trámites actualmente previstos para el sistema PIN24H. En Tráfico se puede consultar los puntos y antecedentes y en el Ministerio del Interior, consultar el estado de solicitudes y tramitaciones.
El sistema ha sido presentado por el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, quien ha subrayado que se está implantando en la Administración General del Estado, pero con la intención de que sea extensible a otras administraciones, mediante la firma de convenios de colaboración.
Beteta ha defendido la simplificación de trámites para facilitar la relación de los ciudadanos con la administración, pero también para ahorrar dinero. A estos mismos fines se dirigen, ha recordado, otras herramientas creadas como la unificación de contratos públicos o el punto único de entrada de facturas electrónicas, que ayudará a la lucha contra el fraude fiscal pero también dará «transparencia a las cuentas públicas», ha dicho.
El secretario de Estado ha defendido también que esta herramienta es más sencilla de usar para los ciudadanos y no requiere conocimientos informáticos como ocurre con los certificados electrónicos.
EUROPA PRESS