La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha defendido el trabajo de su Gobierno con los afectados por las obras de la Línea 7B de Metro sin «echar balones fuera» ni «mezclando temas», a diferencia de lo que hace, a su juicio, el Ejecutivo central.
Díaz Ayuso se ha referido así a los reproches del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, sobre los derribos de viviendas en San Fernando de Henares como consecuencia de las obras de la 7B, en respuesta a las críticas de la Comunidad por las incidencias en la red de Cercanías.
La presidenta ha recordado que los trabajos se remontan a «hace más de una década», antes de que asumiera la jefatura del Gobierno regional, y ha subrayado los «máximos legales» con los que se está indemnizando a las personas que han perdido sus casas.
«No vamos a dejar de trabajar para ayudarles en todo momento en una situación que es realmente difícil y de la que nos hemos hecho cargo en todo momento con la absoluta responsabilidad, pero sin estar atacando, ni echar balones fuera, ni mezclando temas que nada tienen que ver con por ejemplo la situación que se está viviendo en las Cercanías», ha expresado ante los periodistas a su llegada este miércoles al congreso para jóvenes de la Fundación Lo Que De Verdad Importa.
Así, Díaz Ayuso ha recordado las «más de 700 incidencias» que acumula Cercanías en Madrid «sólo en el año 2023» y considera que «se han estado mezclando de manera torticera situaciones muy distintas». «Yo sí me he enfrentado a un problema», ha sentenciado en relación a lo ocurrido en San Fernando de Henares.
«Asumí lo que vino de antes, lo estoy haciendo con total humildad, dando lo mejor de mí, pero haciendo frente al problema, no intentando, como digo, mezclar cosas que nada tienen que ver. Creo que cada uno tenemos que asumir responsabilidades y ya está, y seguir por adelante», ha abundado la presidenta.
En cuanto a la denuncia del consejero de Transportes, Vivienda e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, de que el ministro Puente rechazaba reunirse con él para abordar la cuestión de Cercanías y pedía hacerlo con la propia Díaz Ayuso, ésta ha defendido que «cada uno se tiene que reunir con sus respectivos consejeros, que es como se han hecho siempre las cosas».
DEJAR UN MUNDO MEJOR, LO QUE DE VERDAD IMPORTA
En su intervención en el Congreso de LQDVI, la presidenta regional ha defendido que «lo que de verdad importa» es «dejar un mundo mejor» y saber ser herederos de una larga historia», así como «vivir con generosidad, con amor, con respeto a los demás», además de «defender la libertad por encima de todo».
Díaz Ayuso ha clausurado hoy la 17 edición del congreso de la Fundación Lo Que De Verdad Importa, que ha reunido en el Palacio de Vistalegre de la capital a 6.000 jóvenes.
Allí, ha vuelto a advertir del peligro que suponen las drogas y contra los discursos del «no pasa nada» ante determinadas sustancias como el cannabis.
El objetivo de esta iniciativa en la que ha participado la presidenta es difundir valores éticos y morales universales a través de historias inspiradoras.
En esta ocasión, el congreso ha contado con la presencia del sacerdote argentino Pedro Opeka, que trabaja como misionero en Madagascar; el joven kurdo, Abdul, que arriesgó su vida al escapar de la cárcel en la que el Estado Islámico le mantuvo secuestrado
durante más de cuatro meses, y a la alpinista española Edurne Pasaban, primera mujer en conquistar la cima de las 14 montañas del planeta de más de 8.000 metros.
La Fundación fue creada en 2007 como una organización sin ánimo de lucro para fomentar «la solidaridad, el coraje, la superación personal y la esperanza a través de testimonios de personas».