BBVA ha establecido una nueva política de dividendo que supone repartir anualmente entre el 40% y el 50% del beneficio ordinario consolidado de cada ejercicio, frente al rango del 35%-40% que establecía la política previa, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La retribución al accionista se repartirá mediante un dividendo a cuenta del ejercicio, previsiblemente cada mes de octubre, y un dividendo complementario, que se pagaría una vez finalizado el ejercicio y aprobada la aplicación del resultado, previsiblemente cada mes de abril.
Además, los repartos de efectivo podrán combinarse con recompras de acciones, todo ello sujeto a las autorizaciones y aprobaciones correspondientes que sean de aplicación en cada momento.
BBVA también ha anunciado que el programa de recompra de acciones de 3.500 millones, que queda excluido de la política de dividendo (que solo aplica a la remuneración ordinaria), comenzará a ejecutarse en breve. El primer tramo será de 1.500 millones y no estará sujeto a un precio máximo de la acción.
Estos anuncios han tenido lugar en el marco del Investor Day que celebra la entidad este jueves, en el que los principales ejecutivos del banco presentarán a los inversores su plan estratégico para los próximos años, y han venido acompañados de la publicación de nuevos objetivos para 2024.
UN ROTE DEL 14% Y UNA RATIO DE EFICIENCIA DEL 42% EN 2024
El grupo espera conseguir en 2024 una rentabilidad sobre fondos propios excluyendo intangibles (ROTE) del 14%, frente al 11,7% de los nueve primeros meses de 2021, así como una ratio de eficiencia del 42%, frente al 44,7% de septiembre.
BBVA también ha establecido como objetivo un incremento anual del valor contable tangible por acción más dividendos de un 9% hasta 2024 y ha reafirmado su rango objetivo de ratio de capital CET1 ‘fully-loaded’ en el 11,50%-12%, un nivel que ya supera holgadamente en la actualidad.
El banco ha identificado como una de sus prioridades estratégicas el crecimiento de clientes. En este sentido, prevé sumar 10 millones de clientes objetivo (usuarios de valor que quiere retener) hasta 2024.
Otra prioridad estratégica para BBVA es apoyar a los clientes en la transición hacia un futuro sostenible, por lo que ha reiterado su compromiso de canalizar 200.000 millones de euros en financiación sostenible entre 2018 y 2025.
PALANCAS PARA CONSEGUIR LOS NUEVOS OBJETIVOS
Para alcanzar los citados objetivos, BBVA se guiará por seis prioridades estratégicas. Para convertirse en un banco más grande y más rentable, impulsará la captación de clientes y priorizará los segmentos de negocio de mayor valor y con mayor potencial de crecimiento, como el de pagos, pymes, banca privada y gestión de activos y seguros, optimizando la inversión de capital de manera rentable.
También ve «alto potencial» en el segmento de banca de inversión y corporativa, que actualmente contribuye con el 15% de los ingresos del grupo.
La tercera palanca la conformarán las inversiones digitales en «mercados nuevos y atractivos», como serían los casos del reciente lanzamiento del banco minorista digital en Italia o las inversiones directas en Atom en Reino Unido y Solarisbank en Europa.
Asimismo, el banco seguirá invirtiendo en fintech a través de vehículos de capital riesgo como Propel y Sinovation y tratará de llevar la digitalización «al siguiente nivel», gracias al asesoramiento para mejorar la salud financiera de los clientes y ayudarles en la transición hacia un mundo más sostenible.
BBVA también aspira a seguir siendo líder en eficiencia, a través de la excelencia operativa, así como a crecer de manera rentable en sus principales mercados, para los que ha fijado metas concretas.
En España, el banco priorizará el uso del capital en los productos más rentables (consumo, pymes y empresas), mientras que el objetivo en Turquía será mantenerse como el banco con mayor cuota de mercado y rentabilidad del país. El banco ha destacado que la oferta pública voluntaria (OPA) para adquirir el 50,15% de Garanti BBVA que no controla «crea un significativo valor para sus accionistas».
En cuanto a México, BBVA pretende afianzar su posición de liderazgo y aumentar la base de clientes, mientras que el enfoque en Perú es hacer crecer su franquicia minorista y, en Colombia, ganar escala e incrementar su crecimiento en banca mayorista.
«UNO DE LOS MAYORES NIVELES DE AMBICIÓN DE LA BANCA EUROPEA»
El presidente de BBVA, Carlos Torres, ha apuntado que el liderazgo y la anticipación en digitalización, en el desarrollo de soluciones para mejorar la salud financiera de los clientes o en sostenibilidad son unas fortalezas claras para crear valor para los accionistas, clientes, empleados y la sociedad en su conjunto.
«BBVA se encuentra en una posición única para capturar las oportunidades de crecimiento que nos brinda esta era de cambios sin precedentes», ha celebrado Torres.
De su lado, el consejero delegado del grupo, Onur Genç, ha resaltado que BBVA será un banco más grande y más rentable, con una oferta de valor «única», al tiempo que afianza su liderazgo en eficiencia. «BBVA tiene uno de los mayores niveles de ambición de la banca europea y así lo demuestran nuestros objetivos», ha asegurado Genç.