BBVA ha mejorado su propuesta de indemnizaciones para los afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que acometerá la entidad y cuya negociación ha llegado a su último tercio.
Según informaron fuentes sindicales, el banco también ha incrementado en 26 personas más el número de empleados que pasarán a los centros de gestión remota, hasta el total de 493, de manera que el despido colectivo afectaría a 3.305 personas.
BBVA ha rebajado hasta 50 años el umbral a partir del cual los empleados adheridos al ERE pueden prejubilarse y ha disminuido de 15 a 10 años la antigüedad que tendrá en cuenta para las indemnizaciones.
A aquellos de entre 50 y 54 años les ofrece cuatro veces el 65% del salario, hasta un máximo de 250.000 euros, y un convenio especial con la Seguridad Social hasta los 61 años, así como una prima de 2.000 euros por cada tres años de antigüedad y una prima de voluntariedad de 10.000 euros brutos (entre 10 y 15 años) o de 15.000 euros brutos (más de 15 años).
Los empleados de entre 55 y 62 años con más de 10 años de antigüedad podrán dejar el banco con el 70% del salario y un convenio especial hasta los 63 años, con una revalorización del 1%, descontada la prestación por desempleo y, en su caso, subsidio.
La propuesta para los empleados de 63 años o más se mantiene en el pago de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades, mientras que ha mejorado la de los menores de 50 años y las personas con menos de 10 años de antigüedad a 33 días por año trabajado (con un tope de 20 mensualidades), prima de 2.000 euros por cada tres años de antigüedad y primas de voluntariedad de 5.000 euros brutos (entre 5 y 10 años), 10.000 euros brutos (entre 10 y 15 años) o 15.000 euros brutos (más de 15 años de antigüedad).
CC.OO. ha valorado positivamente el avance en la línea propuesta por el sindicato, pero ha señalado que el banco «debe dar más pasos para acercarse a las condiciones que la plantilla merece».
En este sentido, ha advertido de que quedan menos de 15 días para el fin de la negociación y amenaza con una huelga el día 2 de junio, que se sumaría a los paros parciales convocados.
Esta mañana «centenares de departamentos y sucursales con miles de empleados» de todo el territorio han protagonizado un paro parcial de 9 a 10 horas. «Desde las históricas huelgas en el sector bancario en los años ochenta, no había habido un seguimiento de este tipo en BBVA», ha destacado el sindicato, quien ha convocado un paro de 9 a 11 horas el próximo 31 de mayo.