Tanto si se está a las puertas de una ejecución hipotecaria a manos de un banco o si un promotor afronta necesidades financieras, cualquiera puede pasar por momentos puntuales en los que su estructura financiera requiera de apoyo, ya sea para crecer, no descapitalizarse, obtener liquidez o solucionar problemas puntuales como embargos, préstamos diversos o simplemente enfrentarse a una situación inesperada como una herencia.
Resumiendo, cuando la banca tradicional cierra las puertas, no todo está perdido, se puede acudir a la financiación alternativa o capital privado.
¿Qué significa “préstamos de capital privado con garantía hipotecaria»?
El término “capital privado” engloba los préstamos o la financiación alternativa a la banca tradicional que, aun estando supervisada por los mercados reguladores financieros, es concedida por instituciones financieras no bancarias.
Cuando se especifica que son préstamos con garantía hipotecaria, hace referencia a un matiz fundamental, en sí el préstamo consiste en una hipoteca. Para ello, se requiere de una garantía que ya esté registrada y se ponga en disposición para el estudio y concesión del préstamo hipotecario.
Dependiendo la tipología de la garantía y el titular, estará enmarcada en unos parámetros legales u otros y, por tanto, tendrá un tratamiento y formas distintas en documentación requerida para estudio, plazos y condiciones económicas.
En esta línea, se encuentran empresas como Birdcapital, cuyo propósito es ofrecer soluciones concretas a problemas de financiación cuando los bancos dicen: “No”. Estas soluciones financieras a la medida del cliente se basan en unos parámetros de estudio, asegurando un servicio profesional, transparente y confiable, cumpliendo escrupulosamente todas las medidas legales.
Los requisitos para solicitar un préstamo hipotecario de capital privado
Por ejemplo, se requiere que el solicitante o firmante disponga de una propiedad libre de cargas o con poca carga, ya que es un préstamo hipotecario. Además, será necesario un estudio de la empresa, proyecto o negocio para entender su necesidad y conformar la mejor forma de solucionarla. Según la tipología, pueden ser desde 1 hasta 20 años, desde los 20.000 € hasta los 15.000.000 €. Por ello, es necesario demostrar la solvencia o ingresos, con el fin de tener claro la salida del préstamo y el compromiso de pago. Igualmente, un valor a tener muy en cuenta es la sinceridad y compromiso con los pagos. Es muy importante no solo el perfil económico y la garantía, sino también el perfil del cliente. Un cliente puede encontrarse en Asnef o Rai e igualmente puede optar a la financiación privada.
Por otra parte, recordar que acceder a un producto financiero implica leer y comprender perfectamente las condiciones a las que uno se compromete. Por este motivo, se debe confiar solo en empresas que cumplan todos los estándares exigidos por los mercados financieros reguladores y que se basen en códigos de conducta y en una ética moral y profesional.
Es recomendable, además, contar solo con empresas reguladas y certificadas y asegurarse de que dicha entidad se encuentra en cumplimiento de los requisitos legales que se marcan desde los mercados reguladores financieros, en cumplimiento con la ley hipotecaria, como el registro en el Ministerio de Consumo y Banco de España. Como ejemplo de profesionalidad, destaca en España la empresa Birdcapital, una de las pocas empresas españolas que actualmente cumplen con todos los requisitos legales necesarios citados anteriormente. Además, Birdcapital es una empresa especializada en préstamos hipotecarios de capital privado, destacada como referente en su sector por tener una filosofía centrada en el cliente. Demostrando que la satisfacción y tranquilidad de sus clientes es lo primero, se basan en un servicio de eficacia, eficiencia y calidad.