Autorizada y transparente. Así ha definido el expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, la compra del Banco de Florida ante el juez Juan Antonio Toro. Según informa la agencia EFE, Blesa ha insistido en que la operación -fraccionada- se llevó a cabo atendiendo a los requisitos del Banco de España y que no solicitó la autorización pertinente a la Comunidad de Madrid porque no era necesario ya que no superaba el 5% de los recursos propios de la caja. Atendiendo a ese argumento, Blesa ha recordado que nadie abrió ningún expediente al respecto.

También ha dicho que los porcentajes de la venta se fijaron para que la operación no se encareciera y que se hizo de acuerdo a lo establecido en el derecho fiscal estadounidense. En sus casi dos horas de declaración ante el juez, Blesa ha recalcado que la compra del banco contó con el apoyo unánime del Consejo de Administración de Caja Madrid tal y como refleja el acta del 14 de abril de 2008.

Blesa ha sido uno de los protagonistas del día, a su salida de los juzgados ha sido abucheado e incluso agredido.