El grupo alemán BMW contabilizó un beneficio neto de 10.207 millones de euros en los tres primeros trimestres del año actual, un 368% de incremento en comparación con los 2.177 millones de euros que ganó en el mismo período del año pasado, según las cuentas trimestrales de la firma presentados este miércoles, que recogen una revisión al alza de sus previsiones anuales.

BMW justificó este fuerte incremento de sus ganancias a septiembre por el impacto positivo de ‘mix’ de producto comercializado, así como por los efectos de precio de los vehículos. Así, el presidente de la empresa, Oliver Zipse, afirmó que el consorcio, con el foco puesto en la movilidad neutral con el medio ambiente, está avanzando de forma consistente para lograr este objetivo.

La compañía con sede en Munich logró unos ingresos hasta septiembre por importe de 82.831 millones de euros, un 19,2% de incremento, mientras que su beneficio operativo alcanzó 10.913 millones de euros, un 314% de crecimiento.

Las matriculaciones mundiales de automóviles de la entidad se situaron en 1,63 millones de unidades en los nueve primeros meses, un 18% más, al tiempo que la firma matriculó 129.599 motocicletas en el período, un 20,8% más.

En el tercer trimestre, la empresa incrementó un 42,4% sus ganancias netas, hasta 2.584 millones de euros, y un 4,5% su facturación, hasta 27.471 millones de euros. El beneficio operativo subió un 49,8%, hasta 2.883 millones de euros.

Entre julio y septiembre, la compañía comercializó 593.177 automóviles de todas sus marcas en todo el mundo, lo que supone un retroceso del 12,2%, al tiempo que las entregas de motos bajaron un 7,4%, con 48.999 unidades.

A raíz de estos resultados, la multinacional ha revisado al alza su previsiones para el conjunto del año. De esta forma, contempla obtener un beneficio bruto «significativamente más alto» que el de 2020, así como un volumen de ventas tanto de motocicletas como de automóviles.