Botín reclama a los políticos «responsabilidad y madurez»

La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, reclamó hoy a los políticos “responsabilidad y madurez” para que la economía crezca y sus beneficios lleguen a todos, y atraer inversiones extranjeras además de nacionales.

“A la vista de las encuestas, ésta no será tarea de un solo partido. Necesitamos un pacto por el crecimiento inclusivo. Va a ser necesario llegar a acuerdos entre distintas fuerzas políticas”, glosó la banquera antes de pedir a los partidos “madurez” aprovechando su discurso en la Junta de Accionistas que celebra el banco.

Una economía fuerte es “la gallina de los huevos de oro”, indicó Botín, quien defendió que es la única fórmula para “continuar progresando” y que se invierta en los deberes pendientes que necesita el país.

Para lograr ese crecimiento inclusivo reclamó directamente a los políticos “que hablen claro”, ya que tras las elecciones “necesitamos huir del cortoplacismo e impulsar una agenda reformista con visión a largo plazo”, algo que solo es posible si los empresarios invierten y crean empleo.

Para estimular la actividad y atraer dicha inversión nacional y extranjera que España precisa dijo que “la solidez y estabilidad institucional es crítica”, como también un entorno que apoye a los emprendedores y a dichos inversores.

Por otro lado, manifestó que lo que “sabemos que funciona” es preservar además la sostenibilidad presupuestaria y garantizar que las pensiones de los trabajadores “sean suficientes para tener una vida digna, pero que a su vez sean sostenibles”.

“Estoy orgullosa de mi país”, confesó Botín, en alusión a los muchos progresos conseguidos durante los últimos 25 años, las “grandes fortalezas”, que resumió en “sobre todo los españoles” y algunos servicios públicos que se sitúan entre los mejores del mundo.

En la parte de los deberes a acometer dijo que lograr una educación “de primer nivel” tiene que ser una prioridad. “Gane quien gane, gobierne quien gobierne, necesitamos un compromiso permanente con la educación”, zanjó.

Otra de las tareas específicas que a su juicio debe estar en agenda de forma prioritaria es lograr que España recupere el protagonismo en la construcción europea, ganando un papel más protagonista en las decisiones.

“Europa es la solución, no el problema”, afirmó, alertando sobre los populismos que cuestionan y a veces desean debilitar “el orden económico liberal sobre el que hemos construido la paz y prosperidad en Europa en las últimas décadas”, cuya emergencia se ha producido por la desafección del ciudadano con el impacto de las crisis o la globalización.

A título de ejemplo de lo que pueden generar esos movimientos citó el proyecto de salida de Reino Unido de la UE: “El ‘Brexit’ es nuestro canario en la mina, que nos avisa de los peligros que pueden venir si ignoramos estas oleadas o minimizamos las preocupaciones que millones de personas tienen sobre sus trabajos, su prosperidad y su futuro”.

En el ámbito específico de la banca y ya mirando hacia Europa, abogó por fortalecer un sector que proporciona el 90% de la financiación a las pymes completando la unión bancaria, con la fijación de una regulación equilibrada entre la prudencia y el acceso al crédito de las empresas y “no cuestionar permanentemente el marco legal y normativo”.