La Unión Europea podría rechazar los Presupuestos de Francia para 2015, según fuentes europeas. Se pondrían así a prueba los nuevos poderes otorgados a Bruselas, para evitar una nueva crisis de deuda soberana en la zona del euro.
El ministro de Finanzas galo, Michel Sapin, ya reconocía en septiembre que Francia tendría un déficit público del 4,3 % del Producto Interior Bruto el año próximo, muy lejos del 3 % pactado con Bruselas. También se incumplirían los recortes de costes, que el Gobierno francés cifra en el 0,2% del PIB, frente al 0,8% previsto.
Según fuentes de la Unión Europea, estas cifras podrían llevar a la Comisión Europea a devolver los Presupuestos de Francia de nuevo a París para su revisión. Hasta ahora, el Gobierno francés ha dicho que no aprobará otras medidas más allá de lo que propuso en primavera, insinuando que estaría dispuesto a arriesgarse a un enfrentamiento público con Bruselas.
Para empeorar la situación, este conflicto con Francia además podría repetirse en Italia. El país transalpino también ha dicho que incumplirá sus objetivos presupuestarios. La credibilidad de los nuevos poderes de Bruselas podría venirse abajo si países estos dos países desobedecen las nuevas normativas. La Comisión Europea tiene el derecho de exigir cambios a los borradores de presupuestos antes de presentarlos en los parlamentos nacionales.
No obstante, la Comisión Europea ha dicho ya que todavía no ha recibido el proyecto de presupuestos de Francia para el año 2015 y que por ello es muy prematuro especular sobre si lo rechazará o no. Lo ha dicho el portavoz de Asuntos Económicos, Simon O’Connor, quien también ha señalado que en caso de detectar «incumplimiento grave», Bruselas debe tomar una decisión, y pedir al Gobierno galo cambios en su proyecto presupuestario antes de fin de mes.