El secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, pidió un debate «serio» y «profundo» sobre la rebaja de cotizaciones sociales y tener en cuenta todas las partes de la «ecuación». En el Foro Cinco Días, el secretario de Estado apuntó que habría que subir ocho o nueve puntos el IVA para compensar una bajada de cotizaciones sociales de cuatro o cinco puntos que permitiera una caída de la tasa de paro de un punto.
Burgos aseguró que reducir cotizaciones sociales «es posible si se compensa a la Seguridad Social en las mismas cuantías que necesita para hacer frente al pago puntual, preciso y claro» de las prestaciones, que tiene una cuantía de 8.000 millones al mes.
«Reducir cotizaciones sin sustituir esos recursos supone un enorme problema de sostenibilidad económica» del Sistema, indicó.
En este sentido, explicó que la recaudación por IVA supone el 60% de las cotizaciones sociales, por lo que reducir las mismas para alcanzar una rebaja de un punto en la tasa de paro se estima que necesitaría una bajada de cinco o seis puntos.
«Esto significaría que el IVA tendría que compensar con ocho o nueve puntos esta reducción de cotizaciones y entiendo que nadie está pensando seriamente en este país en incrementar el IVA al 29%», señaló.
Por ello, quiso dejar claro que no se trata sólo de promover una reducción de cotizaciones y hay que tener «muy en cuenta también la otra parte de la ecuación: cómo sustituir esos recursos por impuestos en la cuantía suficiente y con la fiabilidad y predicibilidad a la que atiende el sistema de cotizaciones».
De esta manera, el secretario de Estado se aleja de la propuesta del comité de expertos para la reforma tributaria presidido por Manuel Lagares, que defendía una bajada de cotizaciones y una subida del IVA.
«El debate sobre reducción de cotizaciones es parcial, que sólo atiende a una parte de la realidad; cualquier cambio en la financiación también supone un cambio de modelo» de la Seguridad Social, dijo Burgos, para añadir que el actual modelo es «fuerte» y en el que se han acometido reformas para garantizar su futuro.
Además, Burgos subrayó que el tipo efectivo que se paga por cotizaciones es «claramente inferior» al nominal, y recordó que hay numerosas bonificaciones y reducciones de las que se benefician las empresas.
«Las cotizaciones sociales suponen un muy duro impuesto para el trabajo, pero también son devueltas por un volumen de prestaciones que son un elemento de cohesión social muy importante», defendió.
En materia fiscal, apuntó también que el Gobierno está a favor de incentivar fiscalmente el ahorro, y que los planes complementarios de pensiones no son una «amenaza» para el sistema público.
Por otra parte, el responsable de Seguridad Social reiteró que se seguirá haciendo uso del Fondo de Reserva mientras haya déficit, aunque en cuantías cada vez menores.
En cuanto al déficit, recordó que el objetivo es que cierre 2014 en el 1,1% del PIB, aunque «intentaremos por todos los medios mejorar» esa cifra.
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