CaixaBank ha realizado hasta septiembre alrededor de 9.800 novaciones de hipotecas a tipo fijo y 10.600 refinanciaciones a particulares u otros acuerdos de pago desde que comenzara la subida de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) en julio de 2022.
Además, según los datos hechos públicos por la entidad, CaixaBank ha recibido alrededor de 6.000 solicitudes que encajan con el Código de Buenas Prácticas hipotecario, impulsado por el Gobierno en colaboración con el sector financiero para ayudar a las familias con dificultades para hacer frente a sus préstamos.
Asimismo, el banco destaca que el 80% de la producción de hipotecas concedidas desde 2015 se ha formalizado a tipo fijo. La entidad cuenta, también, con casi 11.000 viviendas sociales y tiene alrededor de 360.000 clientes con cuentas sociales o básicas.
CaixaBank cerró los nueve primeros meses del año con un beneficio neto atribuido de 3.659 millones de euros, un 48,2% más que en el mismo periodo de 2022, cuando ganó 2.469 millones, según informó el pasado viernes.
Durante la presentación, el consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, puso en valor la función que cumple la banca, más allá de nuestros resultados financieros. «Desarrollamos una función social muy importante de la que somos muy conscientes, particularmente en CaixaBank por nuestra historia, porque lo llevamos en el ADN», subrayó.