La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha asegurado que la nueva Ley startups, aprobada este viernes en Consejo de Ministros, establece un marco fiscal «muy favorable» para el sector.
En la rueda de prensa tras el Consejo, la vicepresidenta ha destacado la necesidad de crear un entorno regulatorio que sea «atractivo» y fomente la inversión en áreas estratégicas para impulsar un cambio de la estructura productiva del país.
Posteriormente, la vicepresidenta ha destacado que tener una definición precisa de startups ayudará a medir mejor el número de compañías de este tipo que hay en España y el volumen de inversión que reciben.
Calviño ha remarcado la importancia de ecosistemas como Madrid, Barcelona, Málaga y Valencia y ha subrayado que las grandes empresas le transmiten una «creciente voluntad» de los trabajadores para trabajar desde España.
LA LEY
La Ley del ecosistema de las empresas emergentes establece un régimen diferenciador para las startups, considerando a estas como empresas innovadoras de base tecnológica cuya condición deberá ser acreditada por Enisa.
Entre los requisitos estará el no haber repartido dividendo, facturar menos de cinco millones de euros, tener sede social y la mayor parte de la plantilla en España y no ser cotizada.
El texto legal llegará al Parlamento tras incorporar varias modificaciones reclamadas por el sector, como el aumento de la cantidad de ‘stock options’, planes de acciones para empleados libres de impuestos hasta 50.000 euros, o el aplazamiento de la tributación hasta el momento de liquidarla o que se cumplan diez años desde que las posee.
La medida aumenta también los límites de la inversión libre de impuestos hasta 100.000 euros en empresas de reciente creación (hasta 5 años de vida o 7 en el caso de las biotecnológicas, la industria y la energía) y se eleva del 30% al 50% la deducción.
La ley permite acogerse a esta ley hasta en tres ocasiones, facilitando el emprendimiento en serie, una de las mayores demandas del sector.
Las startups pagarán un 15% de impuestos de sociedades y podrán aplazar sin intereses las cargas tributarias de dos ejercicios.
Otra reforma para atraer inversión es el cambio de tratamiento fiscal del sistema de remuneración de los gestores de riesgo cuando se complementa una desinversión (‘carried interest’), cuya exención de tributación aumenta hasta el 50%.
Otras medidas incluye reducciones de costes arancelarios, la agilización de constitución de sociedades o la eliminación de la doble cotización en emprendedores que trabajan por cuenta ajena.
Además, la ley también incluye un régimen especial para nómadas digitales con el que se busca atraer a españoles que lleven cinco años o más viviendo fuera y profesionales extranjeros ampliamente cualificados.
Calviño ha encuadrado la ley en una serie de medidas económicas comprometida en el Plan de Recuperación como la ley crea y crece o como la reforma concursal, que espera que llegue «en semanas» a Consejo de Ministros.