Cantabria ha sumado seis fallecidos por Covid-19 en las últimas horas, seis de ellos mujeres y una de 59 años, si bien hay 14 hospitalizados menos y los ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) también han disminuido.

Los fallecidos este lunes son un hombre de 88 años, vacunado, que ha muerto en el Hospital Marqués de Valdecilla; dos mujeres no vacunadas, de 63 y 91 años, que han fallecido en Valdecilla y el Hospital Sierrallana, respectivamente; y otras tres mujeres vacunadas de 59, 91 y 96 años, que han muerto en Valdecilla, el Hospital de Laredo y Sierrallana, respectivamente.

De este modo, el número total de víctimas en Cantabria desde el inicio de la pandemia asciende a 784.

Según los últimos datos de Sanidad, cerrados la pasada medianoche, Cantabria registró el lunes 285 casos de Covid, 150 más que el día anterior; tiene 89 hospitalizados, 14 menos que el domingo, y 13 ingresados en la UCI, que son dos menos.

De este modo, la ocupación hospitalaria ha bajado siete décimas, al 5,5%, y la de la UCI dos puntos, al 9,2%, de forma que la primera está en nivel de riesgo medio y la segunda en riesgo bajo.

Actualmente, de los 89 hospitalizados, 61 están ingresados en el Hospital Marqués de Valdecilla, incluidos los 13 en la UCI; 18 en el Hospital Sierrallana; nueve en el Hospital Comarcal de Laredo; y uno en el Tres Mares de Reinosa.

TRANSMISIÓN

En cuanto a los indicadores de transmisión comunitaria, sigue bajando la incidencia acumulada, tanto a 14 días, con 890 casos por cada 100.000 habitantes, que son 102 menos que la víspera, y una cifra que no se alcanzaba desde la Nochebuena del año pasado; como a siete días, con 338, que son 12 menos.

En mayores de 65 años, la incidencia sigue su descenso tanto a 14 días, con 586 casos, como a siete, con 253.

En la última semana se han detectado en Cantabria 1.968 positivos, que se elevan a 5.188 si se tiene en cuenta también la anterior. Así, el virus sigue en descenso con una tendencia del -39%.

En cuanto a la positividad de las pruebas sigue cayendo y se sitúa en el 22,6 por ciento, cinco décimas menos, si bien, pese a estos retrocesos, todos los indicadores de transmisión comunitaria continúan en nivel de riesgo muy alto. La comunidad en su conjunto está en nivel 2 de riesgo, medio.