El presidente de BBVA, Carlos Torres, mostró este viernes su agradecimiento a su antecesor Francisco González por «su renuncia a la presidencia de honor» en el grupo «hasta que concluyan las investigaciones abiertas» para esclarecer las supuestas escuchas masivas por parte de una firma vinculada al excomisario Villarejo, durante su intervención en la junta de accionistas.
El banquero, que no había hecho mención alguna al caso durante su discurso aunque el banco sí había distribuido previamente un video con su compromiso para esclarecer el escándalo tomó de nuevo la palabra antes de darla a los accionistas para entrar de lleno en el caso.
Primero dio las gracias a González, luego hizo balance sobre las actuaciones abiertas por la entidad para esclarecer el caso, y finalmente indicó que pese a la polémica «no hemos encontrado impacto directo en el negocio o la cotización» relacionada con esta investigación.
El presidente de BBVA, afirmó también que seguira investigando con rigor, colaborando también activamente con la justicia en el esclarecimiento de los hechos en el interés de la entidad» en alusión al escándalo de las supuestas escuchas masivas vinculadas con el excomisario Villarejo.
Torres, que hoy rinde cuentas por vez primera a los accionistas como presidente tras haber accedido a dicho cargo hace dos meses y medio, efectuó estas afirmaciones en unas declaraciones facilitadas por el banco antes de la celebración de la junta.
El banquero efectúa además un balance del 2018, considerándolo un año «muy importante y muy positivo para el banco», y donde subraya que el beneficio creció más del 50% y superó los 5.300 millones, impulsado por el crecimiento de los ingresos recurrentes, la contención de gastos y una «importante plusvalía» cosechada en Chile.
De cara al 2019 y más allá, subrayó los «importantes retos» que encara toda la sociedad como son los ambientales como el cambio climático, y también retos sociales. «Estas son las principales preocupaciones de la sociedad. Lo estamos viendo viendo hoy en día con los jóvenes, por ejemplo», indicó.
En este sentido defendió que «más que nunca los bancos tenemos la responsabilidad de financiar el futuro, un futuro con mayúsculas más sostenible para nuestros hijos».
