Sí a la Unidad de España

El Parlamento vota a favor de las PNL de PP y C’s frente al desafío sobranista

Tras un ir y venir de negociaciones de última hora en los salones contiguos al Hemiciclo finalmente el Pleno del Congreso ha dicho sí quiero. El Partido Popular ha conseguido sacar adelante su Proposición no de Ley (PNL) sobre la Unidad de España con 147 votos a favor -incluídos los de algunos diputados de Podemos que pulsaban la luz verde por equivocación- y 101 abstenciones – las del Partido Socialista-.

En un «abstención por abstención» la PNL que también ha salido adelante ha sido la presentada por Ciudadanos y defendida por su líder Albert Rivera, que en la misma línea planteaba la defensa de la democracia, la igualdad y la unión de todos los españoles.

El primer Pleno de la XI Legislatura de la Democracia de España arrancaba bajo el insólito marco de la tardía fecha -han pasado casi cuatro meses desde la celebración de las elecciones generales-, una renuncia, una investidura fallida y la regencia de un Gobierno en funciones -el del Partido Popular-.

Dolors Montserrat, portavoz del Partido Popular, rompía el silencio para hacer su defensa de la unidad de España y ensalzar los logros que «juntos» han conformado «el título de éxito de nuestra historia durante 500 años». Montserrat ha acusado de deslealtad a quienes «han asaltado Cataluña y se han aprovechado del dinero público mientras otros se han dedicado a invertir», poniendo de manifiesto la existencia de un «régimen de castas que diferencia entre catalanes de primera y catalanes de segunda, inventado por los nacionalistas».

Le sucedía en la tribuna de oradores un afónico Albert Rivera, líder de Ciudadanos, quien en su arenga sobre la necesidad de llegar a un consenso sobre la PNL relativa a la defensa de la Democraciá, la igualdad y la unión de todos los españoles, propuesta por su grupo, destacaba que «ni la igualdad de no se negocia ni la unión de los españoles es una moneda de cambio». Así ha recurrido al «amparo» del Poder Legislativo para defender la unidad democrática, lo que pasa necesariamente por una Reforma de la Constitución pero siempre desde el consenso de una «amplia mayoría, la de las tres cuartas partes de la cámara» que ponga en primer paso para inaugurar una «nueva e ilusionante etapa política en la que se de respuesta a las demandas de los españoles».

La socialista Meritxell Batet, tomaba el testigo de su socio Rivera para en un acto de conciencia pedir que «hagamos política» y lamentarse de que en el Parlamento no se discutan temas de mayor calado social e internacional -en referencia a la crisis de refugiados- «el Parlamento está para plantear soluciones reales a los problemas reales de los ciudadanos». Elevada la crítica, y al igual que su colega de la formación naranja, ha pedido que se aborde una «Reforma constitucional entre todos porque esa es la mejor manera de defender nuestra Constitución», pasando por encima de «proclamas sociales y resistencias territoriales».

Sin política para Cataluña

Por parte de Podemos, era Iñigo Errejón el encargado de argumentar la negativa de su grupo a las PNL de PP y C’s «no tienen ninguna política para Cataluña», afirmaba, acusando a los grupos de utilizar el debate territorial para esconder la irresponsabilidad en esta y otras materias políticas. En este sentido ha querido enfatizar en su «sí a la unidad de España, a la pluralidad, a la diversidad, a un Parlamento vivo y a la Constitución». Una defensa de la Carta Magna sobre la que se debe trabajar para que «no sea un jarrón chino».

Tras ellos y en el turno de los minoritarios. La portavoz de Bildu mostró su apoyo a los independentistas «tienen en nosotros un aliado», lanzando un nuevo órdago y avisando de que ellos serán los siguientes en pedir la independencia para el País Vasco.

Quien ha destacado por su brillantez ha sido Aitor Esteban, el portavoz del PNV, quien con ironía reprendía a al Partido Popular «no les mueve la moral, ni el respeto a la democracia, sino achicar el espacio de la izquierda». Las críticas no se han quedado en la formación que lidera Mariano Rajoy, y tras recriminar a los socialistas su «miedo escénico» acusó a los tres grandes grupos (PP – PSOE – C’s) de convertir a Cataluña en «el nuevo pan y toros».

En cuanto a los independentistas Francesc Homs y Joan Tardá, de Democracia i Llibertad y ERC, portavoces de respectivamente, insitieron en la defensa de la consulta independentista. Homs consideraba además una «gran victoria» que el primer Pleno de la Legislatura se haya abierto con un debate sobre Cataluña, mientras que Tardá ha defencido que «las unidades se construyen desde abajo, desde la libertad de decidir».