Cataluña se queda atrás: sufre un déficit inversor en infraestructuras de 28.000 millones en los 10 últimos años

La patronal catalana Foment del Treball considera que para culminar la ejecución de varias obras de infraestructuras críticas para Cataluña es necesario invertir 10.000 millones de euros, a un ritmo de 2.000 millones anuales hasta 2023.

En una nota de prensa, la patronal catalana señala que algunas de estas infraestructuras son el Corredor Mediterráneo, Rodalies de Cataluña, la B-40 Abrera-Terrassa y la ampliación y finalización de la L-9 del metro.

Al mismo tiempo que se concluyen estas obras, Foment sostiene que es necesario lograr progresivamente alcanzar el 2,2% de la licitación de obras del PIB catalán de manera sostenida, unos 5.000 millones anuales, para el conjunto de todas las administraciones y para todas las infraestructuras que a lo largo del tiempo sean fundamentales para Cataluña.

A este respecto, advierte de que en 2018 solo se licitó el 0,8% del PIB catalán. Además, denuncia que el déficit inversor en infraestructuras en Cataluña en los últimos diez años alcanza unos 28.000 millones de euros. Por último, pide aprobar un nuevo modelo de financiación de las vías de alta capacidad, ante la inminente reversión de las concesiones de autopistas, como la AP-7.