El consejo de administración de Cellnex ha acordado llevar a cabo una emisión de bonos convertibles por acciones ordinarias de la sociedad, con exclusión del derecho de suscripción preferente de los accionistas, por un importe nominal de 1.500 millones de euros, según ha informado la compañía en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos netos de la emisión se utilizarán para fines generales corporativos, incluyendo la financiación de operaciones de fusiones y adquisiciones (M&A), según ha explicado la sociedad.
Cellnex ha subrayado que su intención con esta operación es aprovechar las «favorables condiciones de mercado para emitir un bono convertible, lo que le permite seguir diversificando sus fuentes de financiación». Además, la sociedad pretende alargar el vencimiento medio de su deuda emitiendo un nuevo instrumento a largo plazo a un coste «materialmente inferior» a su coste de endeudamiento actual.
La emisión tendrá como destinatarios inversores profesionales de manera exclusiva, y el vencimiento de los bonos será el 20 de noviembre de 2031.
Llegado ese momento, los bonos no convertidos, canjeados, amortizados, recomprados o cancelados con anterioridad se amortizarán a un precio que será fijado una vez concluido el proceso de prospección acelerada de la demanda. La ‘teleco’ estima que dicho precio se situará entre el 101,44% y el 113,24% de su importe nominal, lo que supondrá un rendimiento a vencimiento de entre el 0,875% y el 1,375% anual.
De su lado, los bonos se emitirán al 100% de un importe nominal de 100.000 euros, y devengarán un interés fijo de entre un 0,25% y un 0,75%, pagadero anualmente por periodos vendidos el 20 de noviembre de cada año. La primera fecha de pago de intereses será en 2021.
Los bonos serán convertibles a opción de su titular en acciones de nueva emisión o canjeables por acciones ya existentes de Cellnex (decisión que corresponderá a la compañía) a un precio de conversión que incluirá una prima del 70% sobre el precio de colocación por acción existente que se determine en la colocación acelerada concurrente.
Cellnex podrá amortizar anticipadamente en su totalidad, pero no en parte, los bonos si a partir del 11 de diciembre de 2028 el valor de mercado de las acciones subyacentes, por cada 100.000 euros de nominal, de cada bono excede del 150% del importe nominal incrementado durante un periodo determinado de tiempo; o si en cualquier momento, más del 85% del importe nominal agregado de los bonos inicialmente emitidos ha sido convertido, canjeado, amortizado o recomprado o cancelado.
Por su parte, los bonistas podrán exigir a Cellnex la recompra de los bonos en caso de cambio de control de la sociedad, o en el caso de una oferta de adquisición de las acciones de la sociedad que desemboque en un cambio de control de la sociedad.
La empresa espera que Fitch asigne a los bonos un ‘rating’ de ‘BBB-‘.
Para esta operación, Cellnex ha nombrado un sindicato de ‘bookrunners’, liderado por J.P Morgan Securities, BNP Paribas, Goldman Sachs y Morgan Stanley como coordinadores globales; y Crédit Agricole, Jefferies International y Société Générale como ‘joint bookrunners’, para llevar a cabo un proceso de prospección acelerada de la demanda con el objeto de obtener manifestaciones de interés de inversores cualificados internacionales para la suscripción de los bonos.