El turista chino no se caracteriza por visitar monumentos y museos, sino por destinar la mayor parte del tiempo a comprar y ver un partido
del Real Madrid en el Santiago Bernabeu. Según la consultora Global Blue, este colectivo se gasta una media de 1.400 euros en sus vacaciones, pero la pregunta es, ¿cómo atraerlo?
El principal método de fomentar la llegada de turistas chinos es aumentar las conexiones aéreas con la región. Solo la puesta en marcha de una línea entre Madrid y Pekín supondría una inyección de 70 millones de euros al PIB y la creación de 370 puestos de trabajo. Además, esto vendría de la mano de un aumento de 25.000 compras.
Así lo refleja Luis Llorca, Country Manager de Global Blue cuando dice que “el turismo de shopping es un motor de crecimiento de la economía de un país, siempre y cuando nos dirijamos al visitante adecuado. Por eso, es muy importante facilitar las conexiones aéreas, así como reorientar los mensajes y ofrecer a estos turistas una experiencia de compra de bienes de lujo que satisfaga sus expectativas. Tenemos constancia que muchos chinos cuando viajan al extranjero regresan frustrados por haberse gastado menos de lo planeado, ¿podemos dejar escapar esta oportunidad?…”.
¿Cómo es esa experiencia de compra?
Las políticas de promoción de España deben dar un giro de 180 grados si se busca atraer a este colectivo con gran nivel económico. “Tal vez al viajero europeo podamos captarle con nuestro Museo del Prado y jamón serrano, pero no a un turista chino, a quien hay que diseñar paquetes turísticos customizados que incluyan lo que realmente quieren, que además de ir de compras puede ser ver al Real Madrid en el Bernabéu”, manifiesta Llorca.
Del mismo modo, los comercios deberían adaptarse a sus costumbres: personal que se dirija en su idioma, que estén pendiente de ellos y les ofrezca un trato personalizado de acuerdo con las normas de cortesía asiáticas.
Además, debe ofertárseles una oferta hotelera de lujo, con experiencias y que les invite a repetir en otras ocasiones. Es decir, que se vuelvan a su país con un buen sabor de España y con ganas de volver.
Yasmina Pena
