Cinco predicciones para el Crowdfunding en 2015

La inminente entrada en vigor de la conocida como Ley del crowdfunding (Ley de Fomento de la Financiación Empresarial) está agitando el sector en España. Sin duda, la nueva regulación marcará un antes y un después en el incipiente mercado de la financiación alternativa.

Según un estudio reciente de la Universidad de Cambridge y la auditora Ernst & Young, en el año 2014, en España, el crowdfunding duplicó la cifra de millones canalizados, al pasar de los 29 millones a los 62, y, en el conjunto de Europa, el sector creció un 144 por ciento, hasta alcanzar los casi 3.000 millones de euros. Además, si analizamos las búsquedas en Internet, veremos que el término “crowdfunding” ha sido una de las palabras más buscadas en 2014 (así lo confirma Google Trends, la herramienta de Google que muestra los términos de búsqueda más populares del pasado reciente).

Así, y a la espera de que entre en vigor la nueva norma, estas son las cinco predicciones para el sector en 2015: 1. La regulación española del crowdfunding dará un gran empujón al sector. Aunque la primera versión del anteproyecto de Ley del crowdfunding amenazaba el futuro de todo el sector en España, la buena predisposición del legislador por escuchar las propuestas de los representantes de las plataformas -aglutinados en un grupo de trabajo- ha dado sus frutos. Poco a poco, se introdujeron cambios en el texto original y conseguimos que se aceptaran algunas de las propuestas enviadas. La última de ellas fue el aumento de la cantidad máxima que podrán recaudar los proyectos mediante el crowdfunding, que pasa de 2 a 5 millones de euros por año y plataforma (siempre y cuando la oportunidad de inversión esté destinada a inversores acreditados).

2. El mercado de crowdfunding empezará a consolidarse y algunas plataformas se verán obligadas a cerrar o a integrarse. Durante los últimos doce meses, en España, se ha producido una enorme eclosión de plataformas. En nuestra opinión, el mercado español no es lo suficientemente grande ni maduro como para poder sostener tal cantidad de actores; si bien con la futura regulación del crowdfunding se profesionalizará el sector y esto ayudará a que se consolide, algunas plataformas tendrán dificultades para mantener un flujo de proyectos constante y obtener ingresos recurrentes que les permitan continuar con su actividad. Es muy probable que durante este año surjan uno o dos líderes sectoriales que despunten sobre el resto y un gran número de plataformas de segundo nivel, al tiempo que algunas otras se verán obligadas a cerrar o serán absorbidas por otras más consolidadas.

3. Las instituciones públicas comenzarán a interesarse por las plataformas de crowdfunding de inversión y crowdlending (préstamos). Aunque en España todavía es pronto para que algunas instituciones públicas inviertan a través de las plataformas, veremos cómo, a medida que el sector se profesionaliza,se llevan a cabo vías de colaboración que fomentarán la inversión en empresas de reciente creación y pymes a través de canales como el nuestro. Un claro ejemplo de que hay mucho recorrido por delante es el compromiso del gobierno de Londres para canalizar la inversión de 6,3 millones de euros de fondos públicos en startups y pymes londinenses a través de Crowdcube (UK) adoptado a finales del año pasado.

4. Los emprendedores y empresarios ya no acudirán a las plataformas como último recurso. A medida que avanzamos, vemos como inversores profesionales valoran muy positivamente el análisis y due diligence previo realizado por los analistas de plataformas profesionales, permitiendo a los inversores centrarse en el análisis del equipo humano y la oportunidad detectada. Además, ya existen casos en los que hemos visto cómo grandes y pequeños inversores coinvierten en una misma operación, como la reciente ronda realizada por la startup de drones Hemav, que consiguió 450.000€ de 73 inversores en seis días. Hechos como este demuestran que la mezcla entre inversor acreditado y no acreditado funcionará. Unos (no acreditados) aportan liquidez y validación del producto o servicio, además de convertirse en prescriptores de la empresa, y los otros (acreditados o profesionales) se unen a la empresa para aportar conocimientos, contactos y experiencia.

5. La banca tradicional dejará de flirtear con las plataformas, para involucrarse de forma activa. A medida que el sector se profesionalice, la banca tradicional comenzará a mantener reuniones frecuentes con las principales plataformas para conocer sus intenciones y evolución. En la actualidad el único interés de la banca es mantenerse informada para reaccionar y actuar rápido. La crisis financiera ha demostrado que los propios inversores pueden tomar buenas decisiones sin la necesidad de asesores bancarios o intermediarios. Muchas personas comienzan a demandar nuevos productos en los que invertir sus ahorros directamente, y las plataformas de crowdfunding son el mercado perfecto para ello. Por todo ello, y gracias a Internet, la economía colaborativa es la tendencia más radical de este siglo. Y no solo afecta a la propia economía, sino que también revela un factor prometedor al alza: la confianza.

Pepe Borrell

Crowdcube España