La compañía tecnológica estadounidense Cisco obtuvo un beneficio neto de 10.320 millones de dólares (9.421 millones de euros) al cierre de su año fiscal, que concluyó el pasado mes de julio, lo que supone una caída del 18,2% respecto de las ganancias en el ejercicio precedente, según ha informado la multinacional, que llevará a cabo un plan de ajuste que resultará en el recorte del 7% de su plantilla de alrededor de 81.000 trabajadores.
Los ingresos anuales de Cisco sumaron un total de 53.803 millones de dólares (49.118 millones de euros), una cifra un 5,6% inferior a la del ejercicio anterior, con un retroceso en las ventas de productos del 9%, hasta 39.253 millones de dólares (35.835 millones de euros), mientras que los ingresos por servicios crecieron un 5%, hasta 14.550 millones de dólares (13.283 millones de euros).
En el cuarto trimestre de su año fiscal, Cisco obtuvo un beneficio neto de 2.162 millones de dólares (1.974 millones de euros), un 45,4% menos, mientras que los ingresos de la compañía bajaron un 10,3% en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, hasta 13.642 millones de dólares (12.454 millones de euros).
«Hemos cerrado con fuerza el ejercicio fiscal 2024», afirmó Chuck Robbins, presidente y consejero delegado de Cisco. «En nuestro cuarto trimestre, hemos observado una demanda constante de los clientes con un crecimiento de los pedidos en toda la empresa, ya que los clientes confían en Cisco para conectar y proteger todos los aspectos de sus organizaciones en la era de la IA», añadió.
«Los ingresos, el margen bruto y las ganancias por acción en el cuarto trimestre se situaron en el extremo superior o por encima de nuestro rango de previsión, lo que demuestra nuestra disciplina operativa», afirmó Scott Herren, director financiero de Cisco.
De cara al ejercicio 2025, la multinacional confía en alcanzar una facturación de entre 55.000 y 56.200 millones de dólares (50.211 y 51.306 millones de euros), así como un beneficio por acción de entre 1,93 y 2,05 dólares.
DESPIDOS.
Por otro lado, Cisco anunció un plan de reestructuración que le permitirá invertir en oportunidades de crecimiento clave e impulsar una mayor eficiencia en su negocio y que resultará en el recorte de aproximadamente el 7% de su fuerza laboral global, lo que supondría un ajuste de más de 5.000 empleos.
En relación con este plan, la compañía espera asumir cargos antes de impuestos de hasta 1.000 millones de dólares (913 millones de euros), incluyendo indemnizaciones por despido y otros costes asociados.
Cisco espera reconocer aproximadamente entre 700 y 800 millones de dólares (639 y 730 millones de euros) de estos cargos en el primer trimestre de su año fiscal 2025, que ocupa los meses de agosto y octubre, mientras que espera que el monto restante se reconozca durante el resto del año fiscal.
El pasado mes de febrero, Cisco había anunciado ya un plan de ajuste para el 5% de su plantilla, lo que suponía unos 4.000 puestos de trabajo.