El candidato a presidir la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, reestructurará Avalmadrid para que se «concedan avales».
Talento para crecer. Bajo esta premisa Ignacio Aguado, pupilo de Albert Rivera y candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid por Ciudadanos, se ha comprometido a aprobar 200 «bolsas» de hasta 50.000 euros para retener el talento de jóvenes investigadores que quieran quedarse en España un mínimo de 3 años. Éstas se completarán con la puesta en marcha de «otras 20 más de 150.000 euros para atraerlo» y que se destinarán a expertos e investigadores de «prestigio demostrable». Aguado, que ha participado junto a Albert Rivera y Begoña Villacís en un desayuno organizado por Foro Nueva Economía, ha defendido un cambio del modelo económico tanto a nivel estatal como a nivel autonómico que mejore la competitividad de las empresas a partir de la innovación «me niego a apostar por un modelo económico donde la única manera de ser competitivo sea reduciendo salarios», ha afirmado.
El candidato a la presidencia de la Comunidad también ha querido avanzar «algunos detalles» sobre las 21 medidas concretas para potenciar la economía como la puesta en marcha de un ‘Cheque innovación’ de hasta 5.000 euros para las pymes que apuesten «de manera decidida» por la innovación y que se otorgará siempre y cuando tengan un proyecto que «cuantificable y medible». Además la formación impulsará la profesionalización, el crecimiento y el uso de las nuevas tecnologías de la información en el comercio minorista con ayudas de 9.000 euros.
En lo que toca a las relaciones entre Administración y Empresas Aguado ha insistido en que ésta «no debe ser un muro» sino que se deben agilizar, eliminar trabas burocráticas y mejorar la eficiencia de organismos públicos como Avalmadrid que, en el caso de que llegue a gobernar, reestructurará y convertirá «en una entidad donde se concedan avales de verdad». También se modificará la participación de la Cámara de Comercio en los procesos de internacionalización de las empresas. La propuesta para por vincular el presupuesto de la entidad cameral madrileña a objetivos finalistas que pasen por la internacionalización de las empresas.
La formación empresarial es otro de los pilares del programa de Ciudadanos empleará. El ‘Cheque de desarrollo profesional’ será el instrumento que aglutinará «todas las partidas presupuestarias» en materia formativa y que irá a parar de forma directa a los trabajadores «sin necesidad de pasar por sindicatos o patronales».
Mejorar la eficiencia
Aunque no ha entrado en pormenores Ignacio Aguado ha explicado que las medidas para mejorar la eficiencia y la competitividad que Ciudadanos pondrá en marcha en caso de ganar las elecciones del próximo 24 de mayo se lllevarán a cabo «sin grandes costes ni grandes gastos» y, especialmente «sin recortar batas». Para ello lo primero es detectar las ineficiencias del sistema y eliminar duplicidades a partir de la fusión de organismos, como por ejemplo la que propone la formación para Madrid Network y Madrid I+D.
Por otra parte se habilitará un portal «transparente y claro» en el que se recojan los criterios y las bases objetivas de todos aquellos programas financiados con Fondos Europeos destinados a apoyar el emprendimiento, la innovación y el crecimiento de las empresas. Aguado ha explicado que el cambio «no es una tarea de hoy para mañana pero hay que empezar a sentar las bases ahora y enseñar a gestionar lo público desde lo público».
Armonizar impuestos desde arriba
De llegar al gobernar Ciudadanos no frenará el impulso reformista iniciado por su antecesores, sin embargo gran parte de éste quedará a expensas de lo que ocurra en las elecciones generales del próximo mes de noviembre. Hasta en dos ocasiones Aguado ha hecho referencia a que «las reformas estructurales» deben venir del ámbito estatal. Se refería en concreto a la reforma fiscal y a la de la educación.
En este sentido Ciudadanos propone armonizar impuestos y reducir la carga fiscal de las clases medias, lo que pasa por rebajas entre otros de IVA’s, IRPF’s e IAE’s «para determinados tramos». También se simplificaría el «incomprensible» modelo de financiación autonómica que pasaría a objetivizarse, o lo que es lo mismo, a depender, entre otros, de los ratios de aplicación de las políticas de servicios que se presten a los ciudadanos y no de «criterios absolutamente territoriales».
En cuanto al nuevo modelo de educación, éste se deberá basar en la excelencia y en el desarrollo de «una formación práctica y trilingüe en el que nos olvidemos de aprender de memoria los ríos de España».