Existe un miedo general respecto al nacimiento y llegada de un bebé a la familia debido a todos los gastos que conlleva. En cierto modo esta creencia es cierta, criar a los hijos cuesta mucho dinero y más hoy en día, en las que hay una gran oferta de productos para el cuidado y desarrollo de lo más pequeños, los cuales cuesta mucho dinero.
Gastamos dinero en todo lo que pueda necesitar el futuro bebé como, por ejemplo, desde muebles básicos como la cuna, bañeras bebé, cambiadores hasta todo tipo de accesorios como los chupetes, biberones, ropa o juguetes sin poder prescindir de casi ninguno de estos bienes. La tarea se vuelve más complicada en el momento en que el mercado nos ofrece además cientos de modelos diferentes de cada producto, lo que la elección a veces se vuelve más complicada.
Sin embargo, para muchas familias lo principal es poder ahorrar lo máximo posible para tener los mínimos gastos y que no afecte a la economía familiar al tener que sacrificar otras cosas. Para llevar esto a cabo podemos seguir una serie de consejos que seguro que harán la vida mucho más fácil y económica a los padres.
Las principales cosas en las que podemos ahorrar lo máximo posible
- La comida
Alimentar a un nuevo ser humano cuesta mucho dinero y la opción más económica durante los primeros meses de un bebé es la lactancia materna. A parte de ser económica, la leche materna es el alimento más completo para un recién nacido, aportándole todos los nutrientes que necesita y fortaleciendo su sistema inmunitario.
De esta forma, conseguiremos ahorrar grandes cantidades de dinero en tetinas, biberones y los botes de leche de fórmula al menos durante la primera etapa del desarrollo. Después de la etapa inicial es muy importante cocinar la comida en casa con alimentos naturales, una alternativa económica y saludable a los productos preparados y envasados que podemos comprar en los supermercados.
- Los pañales
Los pañales suponen uno de los gastos más importantes que podemos tener durante la fase del crecimiento de un bebé, un gasto serio del que no se puede prescindir durante al menos los dos primeros años de vida. Es cierto que en los supermercados podemos encontrar marcas que son un poco más baratas pero no deja de ser un gasto importante, lo que podemos hacer es buscar ofertas de pañales a través de Internet o sitios en los que se puede comprar al por mayor.
Otra de las opciones es comprar pañales que no sean desechables, el único inconveniente es que habrá que lavarlos pero las ventajas son muy grandes, como el ahorro económico y el consumo responsable, ya que con el uso de estos pañales ayudamos a no contaminar el medio ambiente.
- Los juguetes
Es un hecho que la mayoría de los niños tienen muchos más juguetes de lo que realmente usan y estos no es que sean especialmente baratos. Todo el mundo quiere regalar los mejores juguetes a los bebés, lo que luego da lugar a una gran abundancia de estos y los niños se acostumbran a tener muchos, consumirlos más rápido y demandar después nuevos modelos.
Los juguetes son los principales elementos para la estimulación del bebé, teniendo un papel muy importante en su desarrollo cognitivo y una buena manera de ahorrar dinero aquí es encontrar juguetes que sean mucho más entretenidos y que puedan ser útiles a un bebé durante un tiempo mucho mayor sin perder su atractivo, donde prime la calidad por encima de la cantidad.
La forma más efectiva para ahorrar en el futuro es acostumbrar al niño y a los padres a pasar más tiempo juntos, ya sea realizando actividades al aire libre o jugando a juegos en los que se potencie la creatividad y la imaginación, lo mejor que existe para no salir a buscar un entretenimiento que implique consumir.
- Comprar de segunda mano
Los bebés crecen muy deprisa, tanto que podemos ver como aumentan de tamaño en cuestión de días y cómo toda la ropa nueva que habíamos comprado ya les queda pequeña. Al igual que ocurre con la ropa lo mismo pasa con los muebles para la habitación o el cochecito. Por este motivo, muchas de las cosas las podemos adquirir de segunda mano ya sea en tiendas especializadas, de las cuales hay muchas hoy en día, de amigos, familiares o de los hijos mayores. Es necesario mencionar que Internet podemos encontrar cosas de segunda mano que están en muy buen estado, a las que prácticamente no se le haya dado uso.
A parte de estas medidas podemos poner en práctica otras muchas acciones que nos ayudarán a no gastar dinero y nos enseñarán a ser mucho más creativos en cuanto a buscar alternativas a la cosas que necesitamos. También nos daremos cuenta de que hay muy pocas cosas que se consideren imprescindibles para mantener a un hijo y todo nuestro gasto dependerá de la utilidad que queramos dar a lo que compramos.