Pérdidas por encima del 1% en la apertura de los selectivos de Wall Street (Dow Jones: -1,02%; S&P 500: -1,05%; Nasdaq: -1,75%). El S&P500 sigue corrigiendo los máximos históricos alcanzados hace un mes y se sitúa en las 1.846 unidades, después de los descensos que se moderaron anoche al cierre y se justificaron por los malos datos macroeconómicos estadounidenses. Datos que hoy volverán a pasar examen con la publicación de la producción industrial de septiembre, la encuesta manufacturera de la FED de Filadelfia y los inventarios semanales de crudo.
Sobre la mesa, los inversores ya cuentan con una buena referencia en el mercado laboral. El paro semanal de Estados Unidos ha descendido a mínimos de 14 años. El número de personas que solicitaron el subsidio por desempleo en la semana que terminó el 11 de octubre ha caído de forma drástica. En concreto, se ha reducido en 23.000 personas, hasta las 264.000, en nivel más bajo desde el año 2000.
En el terreno empresarial, ni siquiera Goldman Sachs se libra de los descensos (-1,69%) después de anunciar ganancias un 50% superiores en el tercer trimestre. El banco estadounidense ha obtenido un beneficio neto atribuido de 2.143 millones de dólares, lo que supone un aumento del 50% con respecto a los 1.429 millones de dólares que ganó en el mismo periodo de 2013. La entidad ha elevado su dividendo trimestral hasta los 60 centavos, desde los 55 anteriores.
Ganancias, sin embargo para United Health Group, del 3,47% tras publicar un aumento de beneficio en el tercer trimestre y elevar las previsiones. La compañía ha ganado 1.600 millones frente a los 1.570 de un año antes. Sus ingresos han crecido un 7%, hasta los 32.760 millones. Su beneficio por acción ha sido de 1,63 dólares, por encima de los 1.53 esperados. Para todo el ejercicio la firma espera obtener un BPA de entre 5,60 a 5,65 dólares, con lo que eleva en 50 centavos su rango anterior.
Ascensos también para Delta Airlines (+2,19%) a pesar de que ha ganado casi cuatro veces menos que en el tercer trimestre del año pasado, incluso habiendo aumentado sus ingresos.
Para el último tercer trimestre, Delta ha obtenido un beneficio de 357 millones, o 42 centavos por acción, frente a los 1.370 millones dólares, o 1,59 dólares por acción de un año antes. Si se excluyen efectos extraordinarios, entre ellos sus operaciones para reducir deuda, el BPA ha sido de 1,20 dólares. Los ingresos han sumado un 7% hasta los 11.180 millones, en línea con las previsiones.
Por su parte, las acciones de Philip Morris registran repuntes moderados. A pesar de haber reducido su beneficio ha superado las previsiones del mercado. Para el trimestre finalizado el 30 de septiembre su beneficio ha caído hasta los 2.160 millones, frente a los 2.340 del año anterior, la firma se ha visto afectada por el impacto negativo de las divisas. Si se excluyen efectos extraordinarios su BPA es de 1,39 dólares, por encima de los 1,34 esperados. Los ingresos han caído un 0,9%, hasta los 7.900 millones, pero aun así supera a los 7.600 esperados. Para todo el año ha recortado sus perspectivas, por el efecto del tipo de cambio.
Por último, Mattel se desploma un -3,57% por culpa de Barbie. La juguetera estadounidense ha obtenido un beneficio neto de 331 millones de dólares un 21,5% menos que los 422 millones del año anterior, debido principalmente a la caída de las ventas de su popular muñeca. En el tercer trimestre, la cifra de negocio ha superado los 2.000 millones, un 8,4% menos que el año pasado.
A demás hoy reparten dividendo trimestral: Lennar, de 4 centavos, Caterpillar, de 70 y Hormel Foods, de 20 centavos por título.