El sector de los servicios inmobiliarios está experimentando una evolución parecida a la de otros campos de la economía española y mundial. En la medida que el mercado se ha vuelto más difícil, las necesidades se han ido diversificando. Es así como la asesoría y acompañamiento se han encaminado hacia el modelo de la especialización.
La especialización de los servicios inmobiliarios se entiende como un equipo profesional cuyo punto fuerte es asistir a un tipo de inmuebles específicos. De la misma manera, se enfoca en áreas territoriales claramente definidas. Esto reduce su cartera y tipo de clientes a grupos claramente delimitados en el mercado, a la vez que aumenta su conocimiento de ese nicho de mercado y los resultados que logra.
El modelo de negocio de De La Mano
Un ejemplo de la especialización de los servicios inmobiliarios es De La Mano, una empresa con un nuevo modelo de negocio inmobiliario especializado en un tipo particular de propiedades y zonas residenciales. Jaime López Rivaya, el fundador de esta firma madrileña, explica que su filosofía de trabajo se basa en concentrarse en la calidad de sus servicios más que en la cantidad de clientes. Su cartera está formada por los dueños de viviendas, no los clientes que están buscando una propiedad para comprar o arrendar. Esto permite al equipo de De La Mano ofrecer un trato humano, muy cercano y específicamente adaptado a las necesidades y objetivos de los propietarios que buscan vender o alquilar su propiedad.
Además de ofrecer un servicio especializado, la compañía brinda una cobertura integral. En ese sentido, su equipo se encarga de la valoración, la estrategia de marketing, la comercialización y el asesoramiento fiscal y legal. Jaime López Rivaya asegura que en De La Mano apuestan por la profesionalización de esta actividad económica, tan deteriorada en el inconsciente colectivo.
La especialización de la empresa inmobiliaria De La Mano
El fundador de esta joven empresa inmobiliaria explica que en su caso solo trabajan con viviendas que estén ubicadas dentro del área de Madrid. No se ocupan de comercializar otros tipos de inmuebles como locales comerciales, oficinas o garajes. El tipo de vivienda que gestionan son de gama alta, ubicadas en barrios o distritos de alto poder adquisitivo como Chamberí, Salamanca, Tetuán y Chamartín.
Para Jaime López Rivaya, esta rigurosidad en la selección de las propiedades con las cuales van a trabajar les obliga a ser los mejores en su nicho de mercado, convirtiéndose en referentes en su sector. La gestión de pocos clientes también les ha permitido forjar relaciones duraderas que se basan en un trabajo íntegro y honesto.