Deutsche Bank recomienda la inversión en las Bolsas emergentes, especialmente las asiáticas que se verán más beneficiadas por la pronta recuperación de China, así como las acciones de las grandes empresas tecnológicas estadounidenses en su estrategia para 2021, presentada este jueves.
El responsable de renta variable del centro de inversiones de Deutsche Bank en España, Diego Jiménez-Albarracín, considera «muy positivas» las perspectivas para las bolsas de Taiwán, Singapur, Malasia y, en general, los socios comerciales regionales de China, que se beneficiarán primero de la recuperación del coronavirus.
Deutsche Bank cree que las empresas de los mercados emergentes podrían ser interesantes por el menor riesgo de duración, índices más granulares, que facilitan la diversificación, y la capacidad de las empresas para beneficiarse de una reactivación del comercio mundial y los pactos comerciales regionales, más obviamente en Asia.
En menor medida, la visión también es buena para la renta variable estadounidense. Los analistas del banco alemán creen que todavía hay potencial, pese a que algunas valoraciones son exigentes, y ve probable que se produzcan más ganancias bursátiles en EEEUU, pero con volatilidad.
Además de las ‘FAANG’ (Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google), ha destacado valores como Visa, Mastercard y Adobe, entre sus favoritas. Jiménez-Albarracín, que considera que no hay una burbuja tecnológica, ha desaconsejado apostar por ‘small caps’, que pueden ser «canibalizadas» por estos gigantes.
En cuanto a la renta variable europea, también prevén subidas para 2021, aunque recuerdan que la composición sectorial es menos favorable, con menos tecnología, y las vacilantes revisiones al alza sugieren un descuento continuo frente a EE.UU.
En el caso del Ibex 35, Jiménez-Albarracín ha señalado que el índice «no refleja la situación de la economía española» por el gran peso de la banca y las eléctricas. Prevé que suba el próximo año y alcance los 9.000 puntos, es decir, una revalorización en torno al 10%, en el caso de que no haya una tercera ola de Covid y se recupere la economía latinoamericana, a la que hay mucha exposición.
El experto ha señalado que los bancos españoles «han hecho sus deberes», pero siguen cotizando «con descuento» y ha pronosticado que podrían recuperarse y dar impulso al selectivo español en 2021. Además, ha confiado en que se recuperen los dividendos en efectivo, uno de los principales atractivos del índice.
Dentro del Ibex, ha destacado como favoritas a Inditex, ACS, Ferrovial, Acciona, Grifols, IAG y Amadeus. Considera que siguen siendo líderes mundiales en sus sectores y van a apoyar a bolsa española cuando mejore el turismo y se recupere el sector servicios.
El responsable de renta variable del centro de inversiones de Deutsche Bank en España cree que es «pronto» para hablar de rotación cíclica, aunque ve que ciertas empresas cíclicas como infraestructuras se van a beneficiar de los planes de recuperación y los estímulos.
RENTA FIJA
En cuanto a los bonos de los gobiernos, el banco considera que siguen teniendo «poco atractivos» y las oportunidades podrían estar en la deuda europea periférica, es decir, la de España e Italia, que se beneficiarán del plan de estímulo en mayor medida.
No obstante, en la renta fija su apuesta es por los bonos emergentes, preferentemente en la deuda corporativa, con pocas posibilidades de ‘default’, aunque también ve oportunidades en los bonos soberanos de regiones emergentes.
En cuanto a activos ‘refugio’ como el oro, el banco anticipa que su precio se vea sometido a presión por la recuperación económica mundial en 2021 y el precio de la onza de oro se sitúe en el entorno de los 2.100 dólares.
Para 2021, la asignación de activos de Deutsche Bank incluye como temas clave la seguridad cibernética, 5G, atención médica, los sectores alineados con la generación ‘millennial’ y la gestión de recursos.
ESPAÑA
Deutsche Bank prevé que el PIB de España crecerá el año próximo un 6,5%, tras un desplomarse previsiblemente un 12,5% en 2020. Así, tras el fuerte castigo de este año, con la peor caída estimada para la OCDE, la recuperación española será la mayor de la Eurozona, que se espera que rebote un 5,5% en 2021, con una inflación en el entorno del 1%.
El banco estima que, pese a la recuperación en el próximo año, la economía de España no vuelva a los niveles previos a la crisis hasta 2023, un año más tarde que Europa y dos años después que Estados Unidos.
«Los fondos europeos, si los usamos bien, son una oportunidad buenísima para España para hacer reformas estructurales que permitan ganar eficiencia y productividad», ha valorado la economista jefe de Deutsche Bank en España, Rosa Duce.