Una delegación del nuevo grupo automovilístico Stellantis (fusión de PSA y FCA) ha visitado este lunes la Ciudad del Vaticano para reunirse en audiencia con el Papa Francisco y presentarle la nueva compañía.
Así, el presidente de Stellantis, John Elkann; el consejero delegado del consorcio, Carlos Tavares, y el consejero delegado de la marca Fiat, Olivier François, se han reunido con Su Santidad para presentarle los objetivos y los valores de Stellantis, así como el compromiso de la empresa con la movilidad sostenible y el nuevo Fiat 500.
Tal como ha explicado la compañía, el nacimiento de Stellantis marca el comienzo de un nuevo capítulo impulsado por la fusión de dos fabricantes de automóviles con una larga tradición, marcas emblemáticas y grandes éxitos, todos estrechamente vinculados a la diversidad y al talento de sus 300.000 empleados en todo el mundo, además de al conjunto de valores compartidos que guiarán a la nueva empresa en su nuevo viaje: integridad y ética en todos los sectores de su actividad.
«Estos valores forman parte del ADN del nuevo Fiat 500, producido en Italia en la planta de Mirafiori en Turín, símbolo del cambio hacia una movilidad más sostenible, más segura, compartida y accesible para todos», ha reivindicado la firma.