Corría el año 2013, cuando una calurosa tarde de verano, de camino a la escuela Julián Besteiro, el vilagarciano Eduardo Abad Sabaris impartió, a quien suscribe, una micro lección magistral sobre el futuro del mercado laboral. “No soy Nostradamus”, afirma. Sin embargo “lo clavaste”, respondo. Un trienio más tarde de aquel encuentro, y hoy como Secretario General de Upta (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos), compartimos tertulia en su despacho de siempre, porque, es «de la generación de las personas», de esa a la que le gusta mirarse el ombligo para aprender y no ir dando bandazos.
Toma el testigo de Sebastián Reyna, ¿continuidad o renovación?
Adaptación. En esta nueva etapa, todos los que estamos al frente de UPTA somos autónomos y jóvenes, los que nos hace ser más atrevidos a la hora de trasladar el mensaje al colectivo en particular y a la sociedad en general. Eso sin olvidar nuestras raíces; tenemos la ventaja de tener al mejor maestro que se puede tener, Sebastián Reyna, que va a continuar ilustrándonos desde la parte teórica de la organización para que quienes le sucedemos podamos llevarlo a la práctica.
¿Cuál es la prioridad de su hoja de ruta?
Tenemos que tratar de que no reviente la burbuja del emprendimiento. Será difícil a la vista de los datos, ya que en mayo se dieron de alta 67.000 autónomos pero desaparecieron 50.000. Entran más de los salen del sistema, cierto, pero ¿por qué desaparecen el resto? No me sirven los 17.000 netos de las estadísticas, hay que analizar las cuestiones socioeconómicas, escarbar en los datos.
Y, a priori, ¿qué es lo que le dicen?
Que entre los autónomos hay tasas enormes de temporalidad e inestabilidad. Una fluctuación del 20% es una auténtica barbaridad. Por tanto insisto, ¡cuidado, no se nos reviente la burbuja del emprendimiento!
Al hilo de su respuesta, entiendo que las políticas que se han puesto en marcha para incentivar el autoempleo no son suficientes…
El sistema pone en marcha todos los mecanismos para que ser autónomo sea muy sencillo pero faltan políticas de consolidación. No necesitamos que el mercado se hiperdimensione de estructuras económicas sino que éstas sean sostenibles.
Si atendemos a los datos de mayo este año se podría superar la barrera de los 3,2 millones de autónomos, ¿es este un crecimiento real o se debe a los ‘falsos autónomos’?
Yo no conozco a ningún falso autónomo, sólo TRADE, es decir, trabajadores autónomos económicamente dependientes que además, suelen estar bastante asentados en su actividad. Aquí hay que dar una gran vuelta ya que las grandes empresas están empleando esta figura para externalizar servicios y desestructurar el trabajo por cuenta ajena.
«La administración no puede ser la primera que ahogue al autónomo»
Cada año se pierden 600.000 autónomos, ¿qué está fallando en la Ley de Segunda Oportunidad?
No hay una verdadera Ley de Segunda Oportunidad. Un autónomo que fracasa en su negocio no es un fracasado y la administración no puede tildarle de tal, sino que hay que darle las herramientas, cualificarle y profesionalizarle, para que pueda volver a intentarlo y que no vuelva a cometer los mismos errores. Por otra parte, en una situación de crisis la administración no puede ser la primera que ahogue al autónomo. Es el azote del colectivo por su posición de muro infranqueable. Tenemos que diseñar un sistema nuevo y flexible con la deuda pública. Los autónomos seguimos teniendo pánico cuando nos llega una carta de Hacienda. Es inaudito que un administrado tenga miedo a un administrador.
En línea con la anterior pregunta la morosidad continua siendo uno de los grandes caballos de batalla de los autónomos…
Una de las soluciones que proponemos es que, en el ámbito de la contratación pública, todos los autónomos o pequeñas empresas subcontratados expidan una certificación que garantice que han cobrado el servicio por parte de la empresa adjudicataria. Es ahí donde está el principal problema la morosidad.
Seguirán defendiendo la cotización por tramos, ¿por dónde pasa su propuesta?
Es inmediato y urgente que el autónomo pague a la Seguridad Social en función de los ingresos efectivos. Esto pasa por poner en marcha la figura del pre-autónomo, que es aquel que no llega a percibir el salario mínimo interprofesional, que ha iniciado una actividad y que a su vez ésta no le proporciona ingresos efectivos para poder pagar la cuota; es decir está en una clara situación de inseguridad jurídica e incorporarlos al mínimo exento. Fijemos una cotización plana que les permita entrar en el sistema. A partir de ahí establezcamos tramos, ¡qué pague más el que más puede! No tiene sentido que quienes ganen más paguen lo mismo que los que ganen menos.
A este respecto, ¿confían en ser escuchados por el futuro gobierno?
Los partidos políticos han recogido la propuesta, a partir de aquí hay que sentarse a debatir y estudiar las fórmulas.
¿Es la cotización por tramos la solución a las pensiones de los autónomos?
Si conseguimos que las bases sean más altas conseguiremos mejores pensiones para los autónomos. La cotización por tramos ha de ser justa y solidaria para hacer que el sistema sea justo y sostenible. No podemos permitir que para pagar la pensión de un autónomo hagan falta cuatro cotizando como hasta ahora.
Hace un par de semanas Fedea (Fundación de Estudios de Economía Aplicada) afirmaba que el IVA es uno de los tributos que más ahogan a los autónomos…
El problema de los autónomos no radica en el IVA, sino en el consumo. Si éste mejorase las actividades se asentarían, habría alegría en la calle. Dicho esto, hay sectores para los que la subida ha sido una catástrofe. Sectores como la peluquería, los veterinarios o el de las rehabilitaciones de vivienda se han visto muy afectados.
¿Qué consecuencias tendría un aumento del IVA u otros impuestos en el colectivo tal y como proponen algunas formaciones políticas?
Se elevaría aún más el fraude fiscal, tal y como ha pasado con la última subida. Creemos que se deben reestructurar de los tramos del IVA. No se puede pegar en la línea de flotación al que menos tiene.
El número de autónomos que cotizan por algo tan necesario como los accidentes de trabajo es cada vez más bajo ¿se necesita cultura de cotización en el colectivo?
Sí. No hay cultura de cotización. Debería haber actividades en las que cotizar se aparejase al sistema establecido para accidente laboral. No obstante desde Upta invitamos a personas que están obligados a trabajar en la economía sumergida a que entren en la economía activa. Para ello cotizar por tramos es imprescindible.
Otro colectivo que le preocupa es el de los mayores de 55 años…
No podemos prescindir de quien tiene el conocimiento. Los senior cuentan con un cúmulo de talento que no podemos perder. Por ello hay que dar un impulso al Plan Nacional de Relevo Generacional, algo que además contribuiría evitar el pinchazo (de la burbuja del emprendimiento) y dotar de sostenibilidad al colectivo; además ayudaría a asentar a la población rural. En este sentido le diré que en Upta queremos dar ejemplo y demostrar la importancia de los mayores de 55 años como mentores, por ello Sebastián Reyna continuará apoyando a la organización como Director Técnico del Instituto para la Formación del Trabajo Autónomo (Ifta).
“La gran empresa emplean al autónomo dependiente para desestructurar el trabajo por cuenta ajena”
Ya que lo menciona, en el ámbito de la formación ¿cuáles son los objetivos?
Queremos cambiar la cantidad de emprendedores por la calidad de los pre-autónomos. Que la formación sea un elemento de dinamización económica con el que consolidar el trabajo autónomo para que sea menos itinerante. Hay una deficiencia en la formación privada orientada al autoempleo: no está diferenciada de la que se imparte entre los asalariados. Por ello vamos a formar a los autónomos en materias prácticas que traten las problemáticas del día a día del colectivo con el objetivo de que éstas sean más rentables y más competitivas. En este sentido quiero dejar claro que no queremos participar en los fondos de formación pero sí diseñarla para que sea realmente útil. Por otra parte y dentro del Plan Nacional de Relevo Generacional, hay que dotar al pre-autónomo de las herramientas necesarias y de la suficiente capacidad en aspectos que tienen que ver con la tecnología y la gestión adecuada de un negocio, con el objetivo de que éste perviva en el tiempo. El objetivo es cerrar el círculo.
Hablemos de cuestiones más generales, ¿hacia dónde va el mercado laboral?
Se está destruyendo a pasos agigantados. Bajo mi punto de vista, la crisis se produce porque los grandes lobbies han querido abaratar los costes de producción vía destrucción de empleo –donde antes cuatro trabajadores hacía una cadena ahora lo hace un trabajador- y salarios. El resultado la precariedad que estamos padeciendo. La regulación de empleo ha desembocado en un tremendo cataclismo en el mercado de trabajo. En el caso de los autónomos, sin embargo, quiero destacar que somos el único colectivo que damos estabilidad a los trabajadores, porque en cuanto podemos contratamos y procuramos dar estabilidad. Es la manera de que se haga nuestro negocio rentable.
¿Se han acostumbrado los trabajadores a trabajar en precario?
No. Lo que ocurre es que se cambia trabajo por derechos y encontramos trabajadores precarios por la mitad de precio, lo que es una catástrofe para la economía de un país, limita los medios de los ciudadanos para consumir.
Los datos macro hablan de recuperación pero, ¿ha llegado realmente a la economía real?
La recuperación no llegará hasta que no se reactive el consumo. La realidad es que se gana mucho menos que hace ocho años. Y no nos engañemos, pese a que los últimos datos apuntan a un crecimiento éste sólo se da en las grandes ciudades y, dentro de ellas en el gran comercio, no en el de los autónomos. Las grandes áreas comerciales pueden hacer frente a la caída con estrategias agresivas de venta. Se añade que son menos estrictos a la hora de cumplir con los plazos de pago, lo que es una gran ventaja competitiva.
¿Y el crédito?
El crédito se recupera en el momento que se recupera el consumo. El matiz está en la financiación que sí se ha reducido y han minimizado los riesgos.
¿Veremos a los autónomos representados ‘de verdad’ en las mesas de negociación?
Quienes están sentados ahora, lo están perfectamente. Nosotros queremos una mesa para nuestro colectivo, no mezclarnos.
Ahora que estamos en periodo electoral, ¿qué pide y qué espera de los políticos?
Primero, que formen gobierno. Después, que pongan en marcha todo lo que queda pendiente de hacer pero que constituyan mesas en las que participemos, tanto en el ámbito transversal como en las sectoriales.
“Los grandes lobbies han querido abaratar los costes de producción vía destrucción de empleo y precariedad salarial”
¿Son los autónomos el juguete preferido de los políticos?; ¿cuáles son las principales carencias que demuestran a la hora de plantear sus propuestas?
Indudablemente. Ahora bien, parto de la base de que los políticos siempre buscan lo mejor para los ciudadanos, no tengo ninguna duda sobre esto. Nunca me he encontrado a ninguno que no haya querido mejorar nuestro colectivo, pero les falta conocer el mundo de los trabajadores autónomos. Hay una diferencia abismal entre la gran empresa y los trabajadores por cuenta propia.
Upta es para los autónomos lo que la UGT a los asalariados. El sindicato ha anunciado que va a reducir su cabeza, ¿ocurrirá lo mismo en su organización?
Sí, de hecho hemos reducido los miembros de la Comisión Ejecutiva y simplificado el organigrama, los procesos. Las organizaciones debemos ser más eficientes y acotar los costes. Mi intención es que de aquí a dos años lleguemos autofinanciarnos.
Así es…
Este gallego de Vilagarcía de Arousa, con 21 se hizo autónomo en “La Calle de la Moda”, una revista con la que marcó tendencias en seis números. Cayó pero se volvió a levantar y se pasó al comercio y la hostelería. Tiene dos hijos: la niña de sus ojos de 20 años y el pequeño que, jugando al fútbol en la playa, le roba las pocas tardes libres que le quedan. El pasado 19 de mayo fue nombrado Secretario General de Upta y tomo el testigo de Sebastián Reyna, a quien admira y respeta como su segundo padre.