El 79% de los particulares españoles que ha comprado vivienda en los últimos doce meses lo ha hecho mediante una hipoteca, lo que supone seis puntos más que el nivel registrado en el año 2019, con un 53% de ellas a tipo fijo, según el estudio ‘Perfil del hipotecado español’ elaborado por Fotocasa.
El portal inmobiliario explica que hay que tener en cuenta la aprobación durante 2019 de la nueva Ley Hipotecaria, más «garantista» con el consumidor y que facilita el acceso a las hipotecas, ya que los datos reflejan un incremento de su contratación, pero también una menor dependencia del apoyo económico familiar.
Además, la encuesta de Fotocasa Research es justo anterior a la aparición de la pandemia provocada por el coronavirus, un factor que «ha alterado todo el mercado inmobiliario».
«La financiación hipotecaria sigue siendo la vía de acceso a la vivienda casi 8 de cada 10 compradores, pero se aprecia un ligero descenso de aquellos españoles que además necesitan ayuda familiar para hacer frente a la compra, un hecho que puede estar relacionado con el descenso del precio de la vivienda a finales del pasado 2019», explica la directora de Comunicación de Fotocasa Anaïs López.
En concreto, del conjunto de personas que necesitaron hipoteca, un 67% solo necesitó el crédito bancario para poder acceder a la compra. Sin embargo, hubo un 12% que también recurrió a la ayuda de un familiar.
En el lado de los que no solicitaron una hipoteca, en el 11% de los casos se debió a que tenía suficiente ahorrado, un 6% solo necesitó ayuda de familiares y un 4% se financió a través de la venta de su antigua vivienda.
EL PERFIL DEL COMPRADOR CON HIPOTECA
El perfil del comprador de vivienda que precisa de una hipoteca para su adquisición registra algunas diferencias en 2020, ya que se ha incrementado el peso que tiene el segmento de edad de 45 a 54 años, aunque es un dato vinculado al mayor protagonismo de este tramo en la compra de vivienda.
Otro cambio que se aprecia con respecto al año anterior está ligado al nivel socioeconómico al haber más personas de niveles socioeconómicos intermedios comprando mediante hipoteca, mientras que los niveles más elevados han perdido protagonismo.
Con respecto a su situación de convivencia, un 41% vive con su pareja y sus hijos y un 32% únicamente con su pareja. Además, se ha producido un incremento significativo con respecto al año anterior de quienes viven con sus padres, que representan un 8%.
En relación con su estado civil, los compradores que se hipotecan son principalmente personas casadas o que conviven en pareja (68%), si bien ganan protagonismo los separados o divorciados (7%) y las personas solteras (24%).
LAS HIPOTECAS A TIPO FIJO ALCANZAN EL 53%
El estudio también refleja que existe un significativo porcentaje de ellos (un 21% en 2020, similar a años anteriores) que además de contratar el crédito tuvieron que vender alguna otra vivienda para hacer frente a la compra de la nueva.
Tampoco hay cambios relevantes respecto a 2019 en cuanto a la planificación y estudio de la parte financiera de la operación, puesto que el 54% de estos compradores que se hipotecan fueron al banco para establecer el presupuesto disponible antes de comenzar la búsqueda de vivienda, un 3% menos.
Cuando se trata de hacer frente a los primeros pagos ligados a la compra de una vivienda, como la entrada o los impuestos, el apoyo familiar sí gana importancia con respecto a años anteriores, aunque la financiación bancaria sigue siendo la solución más frecuente (47%).
En cualquier caso, Fotocasa señala que la decisión más importante respecto a la hipoteca es la que tiene que ver con el tipo de interés (fijo o variable), sobre lo que recuerda que el Euríbor va camino de cinco años en intereses negativos, ya que la última vez que se situó por encima del 0% fue en enero de 2016, y eso «tiene sus consecuencias».
Las entidades financieras han respondido con «atractivas» propuestas de tipo fijo que apelan a la seguridad de esta hipoteca y la estrategia «está funcionando». Por ello, si en 2017 un 41% de hipotecados optaba por el tipo fijo, ahora es el 53%, con datos previos a la pandemia, y de ellos el 60% lo hacen por la estabilidad y seguridad de pagar siempre la misma cuota.
En este periodo de tiempo (2017-2020), la opción de tipo variable perdió sin embargo 15 puntos porcentuales, pasando del 51% al 36%, de los que un 31% lo hacen augurando un Euríbor estable o a la baja.