El 18 por ciento de las reservas en agosto fueron de ‘última hora’
Escoger el alojamiento durante las vacaciones de verano supone más de un quebradero de cabeza para los turistas. Hoteles, albergues, casas rurales… todas estas opciones suponen desembolsarse una gran cantidad de dinero, y más en los meses de verano porque, con la llegada de la ‘temporada alta’, los precios se encarecen. Sin embargo, una buena forma de ahorrar es optar por los apartamentos privados, que permiten una reducción del 70 por ciento en el coste de las vacaciones. Lo dice el portal vacacional Windu, que cuantifica el ahorro medio en 100 euros.
Los principales destinos españoles son Palma de Mallorca, Barcelona, Málaga y Valencia, zonas turísticas en las que el precio de los hoteles durante el mes de septiembre, aunque son menores respecto al mes anterior, siguen siendo elevados. La mayor diferencia se observa en la capital balear, donde los hoteles tienen un coste alrededor de los 160 euros por noche, mientras que los apartamentos privados están a 37 euros, una diferencia de 123 euros. A este le sigue, por cantidad a descontar, Barcelona, Málaga y Valencia, donde los usuarios de los apartamentos se ahorran, como mínimo, una media de 50 euros por día.
Pero esta no es la única forma de ahorrarse ‘un dinerillo’ en las vacaciones de verano, que para unos aún comienzan ahora. La proximidad con la que se hace la reserva influye también en el precio, por eso es importante hacerlo cuanto antes. Sin embargo, siempre hay el típico despistado o indeciso que prepara sus vacaciones a última hora, un 18 por ciento de los viajeros en el mes de agosto.
Las reservas en el último momento impiden desplazarse, quizás, a destinos soñados y tener que conformarse con otros más cercanos. Según Cristina Bestard, directora Comercial de lowcostholidays.es, sólo el 7 por ciento de las reservas de última hora viajaron en avión debido a que «los vuelos se encarecen o se agotan a medida que pasa el tiempo».
La categoría del hotel, el régimen de estancia y la duración del viaje también se limita para los viajeros in extremis. Los establecimientos hoteleros con mayor número de plazas disponibles son los de cuatro estrellas frente a los de menores categorías, que suelen colgar el cartel de ‘completo’, al igual que ocurre en los apartahoteles.
Al encarecerse todo, hay que recortar de alguna forma para que las vacaciones ‘no lleven a la ruina’ a los turistas, y ese abaratamiento suele ir acompañado de menos días de descanso. Tanto así que los viajeros precavidos que realizan las reservas con tiempo suficiente de antelación gozan de cinco a siete días de desconexión, mientras que los de última hora lo hacen apenas tres o cuatro días.
Yasmina Pena